Nos equivocamos de Luna.

Un 31 de octubre mientras los chicos regresaban a sus casas con sus dulces recolectados en la tan famosa fiesta de halloween, Serena y Paola acortaron camino por el parque principal.

-¿Cuántos dulces tenes? -Pregunto Serena a Paola

-Mmm… 1,2,3,4, No mucho!!! Que tan poco junte.- Se lamentaba Paola –¿Y vos Serena?-

-Yo muchísimos!!!!-

-Uff!!! Podrías compartir verdad?

-No, Lo siento debo llevarle para mi hermanito también ya que el no pudo salir por su pierna enyesada-

-Ah! Cierto…

Encontrándose a mitad del camino del parque, Paola frena bruscamente su marcha deteniendo a Serena del brazo

-¿Qué pasa Paola?- Pregunto un poco temerosa Serena.

Paola tenía enfocada su mirada… La cual poseía un brillo de felicidad

-¿No ves?- Le pregunta a Serena

–Es la Luna, la luna llena!!!!
Serena trato de visualizar lo que su amiga veía y allí es donde encontró a la luna llena

-Pues… Si, puedo ver! ¿Pero que tiene? Creo que deberíamos seguir caminando ya casi será medianoche-

-Claro que no!!!- le dijo Paola agarrándola del brazo y tratando de acercarse más a la luna

-No, no Paola. Basta!!! No quiero…- Expresaba Serena enojada

Paola se detuvo y se puso frente a Serena ya enojada también

-¿No lo entiendes?- le pregunto

-¿Entender que Paola?

-Nunca escuchaste hablar de aquella leyenda de la luna llena en halloween? La misma cuenta que si en Halloween te encuentras a la luna llena puedes pedir 3 deseos, es una fecha muuuy importante y es necesario que sea antes de la medianoche!!! Y es genial por que nosotras la encontramos- Expresaba feliz Paola.

Serena observaba a su amiga, la cual estaba eufórica, y observaba el cielo algo confusa

-Pero Paola, mira el cielo!! Está nublado, no creo que esa sea la luna!!

-Por Dios Serena!!!! Claro que es la luna, mira como brilla!!! Ven! Vamos a pedir nuestros deseos…
Paola volvió a tomar del brazo a su amiga y se dirigió hasta el muro donde estaba sentada la Luna la cual (un tanto extraño) les sonreía

-Hola!!!- Las saludo la Luna

-Hola!!!!- Exclamo feliz Paola – Vaya!!! No sabía que era tan mágica la Luna en este día- Se decía…

-¿En qué puedo ayudarlas?- Pregunto la Luna

Paola irradiaba felicidad plena, casi se desmayaba de la emoción.

-Bueno, como sabrás estamos en Halloween…

-Si, ya casi es medianoche- Reflexiono la Luna

-Por eso debemos hacer esto rápido- Le dijo Paola

La Luna la observo algo pensativa, pero aun así dejo que Paola siguiera hablando.

-Bueno, sigo… Como ya debes saber esta fecha no solo es especial para las brujas, las cuales realizan magia oscura, si no para aquellos que encuentren a la Luna llena, podrán pedir los 3 deseos, obvio debe ser antes de la medianoche.

-Pero…- Comenzó a decir la Luna

-No!!- Exclamo Paola- Deja pedir nuestros deseos rápido y te dejaremos tranquila.. Quieres empezar Serena?

Serena, que miraba recelosa a la sonriente Luna no estaba tan segura como su amiga

-No se Pao, no creo que sea la Luna…

-Pero ¿Qué dices?- Exclamo Paola un poco enojada –Claro que es la Luna, mírala!!! ¿Qué puedes perder? Solo unos minutos te llevaran, pides tus deseos y listo!!! Al otro día estos serán concedidos… Vamos Serena!! Comenzaré yo.

Paola se sentó bien frente a la Luna, Serena siguió a su amiga y se sentó también, pero aun miraba a la Luna con desconfianza.

-Bueno…- Comenzó Paola – Yo primero voy a pedirte que me ayudes a pasar este año, confieso que no le puse mucho empeño pero si no paso mis padres no me dejaran ir a visitar a mi abuela en las vacaciones, en verdad es un lujo su casa y ella cumple con todos mis caprichos…

-Es que yo…- Decía la Luna

-No!! Espera, déjame seguir Luna por favor- Interrumpió Paola – Bueno, lo segundo que deseo es que Matías (el amor de mi vida) me invite a salir y podamos comenzar una historia de amor, tal y como lo deseo hace 5 años!!! Y tercero… No, aguarda te dije- Volvió a frenar a la Luna quien quería decir algo y ya estaba un poco nerviosa…- mi tercer y último deseo es poder quitarme la tempera del pelo antes que me vea mi madre y me deje pelada!!!!- Termino Paola feliz –Es tu turno Serena… Pide tus deseos-

Serena con su desconfianza aun, pero, entendiendo que no perdía nada con pedir sus deseos se limita a decir

-Deseo que todos mis deseos se hagan realidad- Sentenció

-Ahhh!!! No vale!!!- Dijo Paola

-¿Por qué no?- Pregunta Serena- Es mi deseo, que tú los malgastes no es problema mío…

-Mmm… No sé si vale, dime Luna ¿Vale? Si así fuese cumplirás nuestros deseos por la mañana??

-Bueno, primero gracias por al fin dejarme hablar… segundo no creo poder cumplir sus deseos-

-¿Cómo que no?- Salta Paola nerviosa

-¿Por qué no? Es fácil… Yo no soy la Luna!!!!

-Pero… Brillas y eres redonda… no me cargues!! Eres la Luna!!!- Paola estaba al borde de las lágrimas

-¿Sera que estamos en Halloween? Por eso decidí disfrazarme de la Luna ¿esta genial verdad? Brillo y todo! Al terminar quise venir al parque y sentarme un rato en el muro, luego vinieron ustedes y bueno, pensé que venían a felicitarme por mi grandioso disfraz, Gracias!! La pase genial con su compañía al principio me asustaste, Emmm.. ¿Paola era tu nombre?  Me asustaste pero luego me pareció gracioso… Bueno chicas me voy ya que es medianoche y mi madre me matara si no llego. Ah! Mi nombre es Diana fue un gusto…

La Luna, de nombre Diana, se bajo del muro y se marcho brillando dejando a las chicas, Paola confundida y sumamente decepcionada y Serena con una sonrisa de.. ¡Yo te lo dije!

-¿Puedes no decir nada de lo que estas a punto de decir y no contar a nadie esto?- Pregunta Paola a su amiga – Sobre todo mis deseos…-

-Jajajaja!! Claro que si amiga… una lástima, pude hacer reír a muchos con esta anécdota pero si quieres que lo guardemos para nosotras así será… Vamos ya es re tarde!!

Las amigas juntas tomadas de la mano se apresuraban a llegar a sus casas y mientras se alejaban se podía ver detrás de las nubes una brillosa y hermosa Luna llena.