Mi mas bella casualidad. (Caché)

El restaurante

Pov Poché

Caminamos hacia la entrada de aquel lugar

P- ¿Tienes auto?

C- No, pero si tú no tienes podemos pedir un taxi – saco su celular y comenzó a buscar algo

P- Tranquila, guarda eso, si tengo auto, ven bajemos al estacionamiento

Llegamos al estacionamiento y sentí que debía ser algo Cortez así que le abrí la puerta del copiloto, acto al cual ella rio, pero sentí que hice algo bien, di una vuelta por el auto hasta llegar al asiento de piloto, el camino era silencioso, pero no era un silencio incomodo, era silencioso hasta que Calle lo rompió

C- ¿Puedo poner música?

P- Si claro

Conecto su celular a la radio, me di cuenta que sus gustos musicales eran iguales a los míos, todo el camino pasamos cantando, cuando llegamos estacione el auto en la acera, apague el auto y Salí para ayudar a Calle a bajar, como hice anteriormente, abrí la puerta para que ella baje, otra vez rio, me encanta su risa, en la entrada estaba un viejo amigo, Juan Pablo, lo conocí la primera vez que vine aquí, era muy cool y de vez en cuando me acompañaba, ya que siempre venia sola, se me hacía un lugar que no cualquiera podría conocer, el ambiente es muy bueno y la comida ni se diga, me acerque con Calle hacia donde él estaba

J.P- Al fin no traes a alguien contigo

P- Ya sabes la razón Juampi, ¿nos das una mesa?

J.P- Espera un momento a que se desocupe una, guarde la tuya pensando que otra vez vendrías sola

P- No hay problema, por cierto, ella es Calle y él es Juan Pablo

C- Hola – dijo con una voz tierna, dios Daniela, ¿cómo puedes ser tan perfecta?

J.P- Hola, debes ser muy especial para Poché porque eres la primera persona que trae aquí

No pude evitar ponerme roja, pero en parte era verdad, sentí la necesidad de que Calle conozca este lugar, no era muy conocido, pero nunca faltaba gente, antes de que alguno pudiera hablar una pareja salió del lugar dejando una mesa libre

J.P- Síganme por aquí señoritas – dijo en tono caballeroso

Cuando llegamos a la mesa Juan Pablo nos dejó dos cartas y se retiro

C- Tu amigo no está nada mal – dijo mientras veía el menú

P- Si, lástima que es Gay

Las dos reímos, ordenamos y 15 minutos después ya estaba nuestra comida en la mesa

C- Dios, esto esta tan bueno

P- Lose, por eso es un lugar especial

C- Así que, ¿soy la primera persona que traes aquí? – dijo de forma coqueta y levantando una ceja

P- Una chica perfecta merece ser llevada a un lugar perfecto – ¿espera que acabo de decir? Le acabo de confesar mis pensamientos, ella se sonrojo y sonrió, esa sonrisa podría verla toda la vida y nunca dejaría de embobarme al verla, una cosa la tenía en claro, Daniela Calle era perfecta, pasamos conversando casi 2 horas, me di cuenta que es muy parecida a mí, podría seguir con ella en ese lugar tan perfecto, pero sonó mi celular, vi la pantalla y era mi papa, me disculpe con calle y conteste

-Llamada-

J.C- Hola hijita, donde estas ya es algo tarde no crees? Dijiste que solo irías al cine con Sebastián