Solo un año

Capítulo 4

Entré a la cafetería buscando a Camil. Vaya la sorpresa que me llevé cuando encontré a la chica sentada con un chico platicando y riéndose. Me acerqué a ellos para ver de quien se trataba y visualice a Jungkook, me alegré de que no fuera otro chico pues habíamos hecho una promesa ayer.

T/n: Hola- los dos se sobresaltaron, pues no me esperaban.

Camil: Hola t/n....No te esperaba.

T/n: Ya vi que no me esperaste y hasta me cambiaste- dije bromeando mientras me sentaba frente a ella.

Jungkook: Perdon si soy un estorbo...Si quieres ahorita me...- no lo deje terminar, pues no lo quería hacerlo sentir mal.

T/n: Claro que no Jungkook, lo dije bromeando- me reí de su expresión confusa.

Camil: ¿Ya se conocen?- preguntó curiosa.

T/n: Si, compartimos clase de fotografía. Toma fotos muy buenas- dije mientras lo miraba.

Jungkook: Gracias... Tu también tomas unas fotos muy buenas- dijo algo sonrojado.

Seguimos platicando cómodamente. Jungkook era un chico muy amable y divertido, (ya veo porqué se estaban riendo tanto este par adolescentes) hasta que llegó un chico castaño y se sentó en frente de Jungkook y alado de mí. Era Jimin.

Jimin: Hola chicos- nos sonrió a las dos con su típica sonrisa conquistadora.

Hola- respondimos al unísono.

Jimin: Soy Jimin, por si no me conocían- (argh, como si no lo conociéramos).

Camil: Mucho gusto soy Camil y ella es t/n- dijo sonrientemente al igual que Jimin le devolvía la sonrisa.

Jimin: Siento molestarlas pero Jungkook y yo tenemos practica de fútbol y no podemos llegar tarde si no el entrenador nos pondrá trabajo doble.

Camil: Esta bien, no te preocupes- ambos chicos se pusieron de pie.

Jungkook: Bueno... Me tengo que ir, que tengan un lindo día- dijo sonriente, dió media vuelta y se fue con su amigo hacia las canchas de futbol.

T/n: ¿Y?.

Camil: Y ¿qué?- me respondió haciéndose la tonta.

T/n: Andale Camil, no te hagas. ¿Cómo te fue con Jungkook?.

Camil: Ah...Pues...- estaba nerviosa.

T/n: Tranquila, no me burlaré de ti, ya te había dicho- le dije con un tono seguro.

Camil: No estuvo mal, es un chico muy agradable.

T/n: Si...Es un buen chico, me cae bien- le dije contenta -Ah...Por cierto... Cumpliste tu promesa.

Camil: Claro, yo no ando haciendo promesas que no cumpliré- dijo triunfante.

T/n: Okay, okay. Pero aún no es tu novio- le devolví el gesto.

Camil: Oye, todo a su tiempo.

T/n: Si, claro. Aquí disimulando tu soledad- reímos las dos al mismo tiempo pero ella me dió un ligero golpe en el brazo -¡Hey!- me quejé.

Camil: Te lo merecías- ella rió pero yo entrecerre mis ojos en forma de burla.

Platicamos mientras no dirigiamos hacia los casilleros. Esta clase la compartíamos, era Ingles, así que sacamos nuestras cosas de los casilleros y no dirigimos al aula de arriba, ahí daban la siguiente clase.
Camil y yo nos sentamos juntas. Las siguientes clases no estuvieron mal excepto en matemáticas, donde la maestra pidió la tarea, la cual no había hecho porque estaba con Camil y vi la pelicula, así que me bajaron puntos (odio a esa maestra).
Terminaron las clases y aburrida me despedí de Camil, me quiso acompañar a mi casa pero negué, solo quería llegar a dormir, no sin antes claro de hacer mi tarea de matemáticas. No quería perder más puntos.
Llegando a mi casa encargué una ensalada por teléfono, pues tenía tanta flojera de cocinar que preferí llamar al restaurante.
Mientras esperaba mi ensalada comencé a realizar mi tarea de mate, era poca pero complicada.
Llamaron a la puerta y abrí. La chica me entrego mi ensalada y la pague. Me dirigí al comedor dispuesta a comer lo que había ordenado. En cuanto termine de comer volví a subir a mi cuarto para terminar mi tarea, pero estaba tan cansada que la última página que me quedaba la conteste a lo tonto, para después tirarme en mi cama y caer en un sueño profundo.
Me desperté porque escuche algunos ruidos en la planta baja. Por un pequeño lapso de tiempo pensé que era mi tía pero terminé descartando la idea porque siempre que ella llega grita un "¡ya llegue!" O simplemente hubiera escuchado el ruido del carro. Comencé a levantarme de mi cama para después bajar las escaleras algo indecisa, ese ruido no era nada agradable y con cada escalón que bajaba podía escuchar como este se intensificaba, cuando por fin estaba en el último escalón pude percatarme que el ruido venia de la cocina, pero no pareciera que hubiera alguien en ella, así que como toda loca paranoica lo primero que vino a mi cabeza fue que había un fantasma en la casa, me armé de valor para finalmente adentrarme en la cocina, pero tal y como me lo esperaba no había nada. Di media vuelta para salir de la cocina, pero justo antes de poder lograrlo pude ver cómo un  pequeño animal salía de un lado de la cocina y en eso momento lo único que pude hacer fue gritar como loca histérica por toda la cocina dando de repente uno que otro brinco porque aquel pequeño animal no dejaba de moverse de un lado a otro dentro de ésta. Comencé a agarrar cualquier cosa que estuviera a mi alcance para lanzárselas a esa rata la cual de un momento a otro salió de la cocina y se dirigió a la sala, aproveché y tome una escoba que estaba en el comedor para ahuyentarla o algo, porque bien sabía que no sería capaz de matar a ese animalito por más asco que me diera, me daría más asco matarla, pero para cuando me adentré en la sala ese animal había desaparecido o mejor dicho escondido.

T/n: ¡Maldicion!- dije para mí misma -tendré que esperar a tía Grace- murmuré.

Yo misma había podido buscar la rata, pero...¿Qué hubiera hecho si la encontraba?, ¿volver a gritar y brincar como loca?, lo mejor sería espera hasta que mi tía volviera, ella sabría qué hacer, digo, no es la primera vez que veo una rata pero normalmente tía Grace se encarga de ellas. 

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Después de mil años aquí estoy corrigiendo el fic.
Atte:Vanechu <3
A&V