Nos conocimos y nos amamos
y se convirtió en un recuerdo que nunca podré borrar
un melodrama que vale la pena mirar
con un final bastante decente.
Eso es suficiente para mí, yo te amaba.En la televisión ponían noticias sobre los "fantásticos" estudiantes de UA. Kirishima no lo hacía nada mal. En el salón de clase todos lo elogiaban sin saber un carajo de la lucha interna que tuvo en esas milésimas de segundo.
—¿Clases suplementarias? ¿Eres así de imbécil? —Se estiró en el piso de mi habitación al tiempo que suspiraba.
—No, pero no puedo reponer las clases por mi cuenta. —Regresé la vista al libro que leía. Sentí un peso extra en la cama. —Bakugou...
—¿Qué quieres? —Sentí la respiración de Kirishima en mi cuello.
—¿Puedes voltear acá por un segundo? —Estaba cerca.
—Aléjate.
Te recordaré como una película
o un cálido día de primavera.—Por favor... —demasiado cerca. —Katsuki... —mierda, mi primer nombre. Mi mirada se encontró con sus ojos y caí en cuenta de que ningunos ojos me mirarían de la manera en que los suyos lo hacían. ¿Existiría un mirada tan hermosa como la suya?
Y esa mirada que me permitió
saber lo mucho que fui amado.—Katsuki por favor... —sus dedos tomaron mi barbilla con delicadeza. Podía escuchar el latido de su corazón, al inicio débil, después como si alguien tocara la puerta. Tocar la puerta. Alguien.
—Bakugou, ¿Kirishima está contigo? Lo necesitamos. —Sero. Sero llamaba a la puerta, Sero buscaba a Kirishima y el peso extra en mi cama desapareció, al igual que su mirada, su sonrisa, todo él.
Durante las siguientes semanas Kirishima estaba cada vez más distraído. No se colaba en mi habitación, no sonreía, al menos a mí no, sonreía con el nerd de mierda, con la rana y con mujer de grandes pechos, pero no conmigo. Sólo hablábamos en compañía de alguien más. No hubo más sesiones de estudio que terminaran en algo más, tampoco escapadas detrás de los dormitorios, no más pláticas largas y cómodos silencios, no más días de primavera en verano, no más caminatas por el atardecer y mucho menos rescates anhelados.
Esos momentos los recordaré de vez en cuando
como si fuera parte de mi vida
y mientras estés dentro de cada uno de ellos
es suficiente para mí.—Oye.
—Dime. —no me miró. Eijirou siempre miraba mis ojos al hablar. Esa fue la primera vez que sus ojos no miraron los míos.
—Hablemos un rato, en quince minutos, donde siempre.
El calor menguaba al paso que la tarde perdía con la noche, el arrebol en el cielo resultaba inesperadamente inquietante y para cuando Kirishima llegó la Luna ya reclamaba el reinado del firmamento.
—¿Qué pasa? —Su voz vaciló por un segundo.
—Eso quiero preguntar yo, últimamente estás evitandome, ¿qué diablos pasa?
—Eso, yo... —no lo negó. —Estuve ocupado con las prácticas, también el festival llegó de repente; deberías saberlo, tu también estuviste ocupado.
—Por supuesto que sé que estuvimos ocupados, no soy imbécil. Sin embargo tú me evitaste, evitaste estar solo conmigo.
—He tenido que pensar algo, solo no hubo tiempo.
—Pero tienes tiempo para estar con una maldita niña y el imbécil de Deku, tienes energía para mensajear con ese héroe profesional, tienes ganas de estar con alguien que no soy yo. —Hicenun esfuerzo inhumano para que mi voz no se rompiera. Me pareció que su respuesta tardó eternos segundos en llegar.
ESTÁS LEYENDO
Escenario de amor
Short Story-Te amo. -El corazón se me estrujo. -Y lo seguiré haciendo por un tiempo. -Emprendió el camino de regreso a los dormitorios. Con cada paso que daba se extendía un océano entre nosotros. -Sinceramente espero que no sea tanto. No pude seguir escuchand...