Amor A Primer... ¿Beso?

I. Zayn

Salimos de la convención y nos subimos al auto de Louis

—¿Te quedaras en mi casa? —pregunto Louis por enésima vez en el día

—Sí, ya les había avisado a mis padres

—De acuerdo —empezó a conducir a su casa, Louis pasó por una calle que nunca había visto, una de ellas estaba llenada de autos y una casa en particular tenía luces de colores y música a un tono muy alto, sin duda una fiesta de algún adolescente

—Oye ¿por qué pasamos por aquí?

—Hace unos días encontré un atajo hacia mi casa

—Cada día descubres un atajo nuevo —gire los ojos

—Disculpa, aun no conozco del todo este lugar, ¿olvidas que me acabo de mudar hace un mes?

—Lo sé, no tienes que recordarme que ya no somos vecinos

—Hey, pero no te pongas sentimental

—Eso es lo malo, aún tengo que seguir viendo tu fea cara en la escuela —dije en tono de burla, porque la verdad aun me pone triste que ya no nos podamos ver en todo momento

—Me amas

—Claro, porque si no nadie más lo haría

—Muy gracioso Malik, además te sorprenderías realmente al saber de todas las personas que caen rendidas a mis pies

—Pero por el mal olor que tienes

—Ja ja ja que gracioso eres —me miro mal

—Es broma Tommo —le sonreí, el solo giro los ojos

—Mira hay una fiesta —señaló la casa donde había música— vamos

—Por supuesto que no, no estamos invitados

—Y eso que, no tienen seguridad

—¿Cómo rayos lo sabes? ¿qué tal si los guardias están disfrazados para no sospechar?

—Debes dejar de ver tantas películas

—Louis no quiero meterme en problemas

—Y no los vas a tener, vamos solo un rato, además es de disfraces, con los que traemos nos podemos hacer pasar por alguien más

—No estoy seguro de esto

—Será divertido ya veras

—De acuerdo, pero si algo malo sucede quiero que tengas presente que quedara en tu conciencia

—Sí, sí, sí, ahora vamos —estacionó el auto donde pudo y bajamos— oye calmante, se te nota de lejos lo nervioso

—Es que lo estoy, cada que se te ocurre algo nunca salimos bien librados

—Esta vez no será así —me sonrió, pero yo lo mire mal

—¿Cuantas veces he escuchado eso?

—Me ofende tu falta de confianza —se puso la mano en el pecho de manera dramática

—No es falta de confianza, es solo que te conozco demasiado bien —Louis iba a responder, pero lo interrumpí— bueno ya, hagamos esto antes de que me arrepienta y eso va a ser muy pronto —caminamos hasta la puerta y efectivamente había un chico ahí cuidando la puerta— te lo dije

—Cállate —me susurro y luego se giró hacia el chico— ¡hola! perdón por el retraso, tuvimos problemas en encontrar la casa

—¿Y tú eres? —nos miró con una ceja alzada, era un chico muy alto, y por supuesto que en musculatura más grande que Louis y yo juntos