Durante estos meses de invierno, todas y cada una de las noches conté el daño que me habías hecho, sin darme cuenta del daño que yo te había hecho a ti. Me puse en tu lugar por primera vez en mucho tiempo y entendí que no fue porque me odiabas sino lo contrario, me amaste lo suficiente como para hacerme mierda, como para dejarme vacía.
Tal vez, yo te deje vacío, sin ánimos y por eso te fuiste lejos, tal vez fui yo la que hizo que todo se derrumbara. Perdón, te lo digo ahora, te lo dejo escrito para que lo leas cuando quieras, por si no tengo el valor de decirte en la cara. Perdón por todo el daño que te hice, por romperte el corazón (no se si lo hice o no) pero perdón de todas formas. Mereces más de lo que yo puedo darte, mereces a alguien que no tenga dudas, que sea fiel a sí misma, mereces que te amen de la misma manera en a que lo hacías cuando de verdad te enamoraste, mereces una vida feliz con una persona que no soy yo... hoy me doy cuenta que mi miedo a perderte se convirtieron en miedos a recuperarte y a no saber hacerlo bien.
Esto no quiere decir que dejo de amarte, por lo contrario esto explica lo mucho que te amo. Esto explica mi comportamiento y todas las dudas que tengas.
Te amo.
