Capitulo 8

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Al igual que todos los días, excepto sábado y domingo, me dirigí al colegio en donde se podía observar de lejos a Trisha llamando la atención. Ignorando completamente la atención que le ponían todos a esa cosa que se hacía llamar humana, caminé a mi casillero y para mi sorpresa encontré a esos ojos verdosos, que trataba de evitar, frente a mi, en su casillero. Bien.

> No podrás evitarlo si su casillero está junto al tuyo, boba.<

Sabes que te insultas a ti misma cierto? Bueno como sea, lo iba a evitar hasta que sea necesario, cueste lo que cueste. Obvio que no iba a funcionar, pero la intención vale.

Al llegar al salón de la señorita Williams, profesora de historia, me senté junto a la ventana dejando el asiento de al lado desocupado. Y adivinen quien se sentó allí... Con una gran sonrisa se sentó conmigo. Definitivamente evitar a Harry no iba a funcionar.

- Muy bien alumnos hoy aprenderemos sobre la II Guerra Mundial...- se limitó a decir la señorita Williams.

- Por qué saliste corriendo ayer? - susurró el innombrable.

- Te podrías callar quiero prestar atención.

- Responde y no te molesto.

- Porque si. Feliz?

- Señorita Thomson quisiera compartir algo con la clase?- me reprendió la maestra. Miré amenazante a Harry.

- No me molestes si?- dije enojada.

- Pero...

- NO! - al parecer eso lo dije muy fuerte.

- Señorita Thomson, me aburrió. Si no le gusta mi clase se puede retirar. Tenga, quizás el salón para los revoltosos sea mejor para usted.- dicho esto me entrego un papel y me fui enojada. No, enojada no. Indignada por lo que había ocasionado ese chico de bellos ojos. Fulminé con la mirada a Harry y me fui, para ser sincera con algo de temor por lo que me esperaba.

Jamás había ido con los revoltosos, esto mancharía mis papeles. Maldito Harry. Ahora seré conocida en el colegio como "la chica mala- la chica que no sigue las reglas- la delincuente". Quizás exagero, pero eso podría pasar. Uno nunca sabe, la gente aqui es muy chismosa.

Y ahí estaba yo frente a la puerta con un cartel que decía "sala de castigos" hasta el nombre ya era temible, bueno no pero solo hay que poner suspenso al asunto. Al abrir esa puerta me encontre con un verdadero zoológico; habían muchos monos peleandose entre ellos, unas zorras coqueteando con cualquier tipo que encontraban carnada fácil. En una esquina se encontraba un hombre que acorralaba a una mujer con la frase "Ramera" en la frente, se podía decir que era toda una pelicula porno esa escena... y por último el pobre profesor Hamilton, se puede decir que él estaba mucho más asustado que yo, como no estarlo si estás amarrado en una silla en la cuál te daban vueltas y vueltas, podre señor Hamilton.

Tomé asiento bien alejada de todos esos animales salvajes... parecía la única normal ahí, esta bien no soy muy normal que digamos, pero en esos momentos si lo era. Saqué mi celular del bolsillo y le escribí a Clary un mensaje "HELP ME, no sé como pero sacame de aqui. El tonto de Harry hizo que me mandaran a la sala de castigos. CORRE!"  iba a apretar el botón de enviar cuando alguien me roba el celular. No podría ser peor.

*Narra Harry*

Me sentí mal cuando Allison fué enviada a la "sala de castigos", asi que tenía que pensar en algo. Era obvio que ella no pertenecía alli por lo que tendría que llegar Super Harry a su salvación.

- Alguna duda?- dijo la señorita Williams y yo levanté la mano. - si digame joven, cual es su duda?

- Po-podría ir al baño? - tartamudee y le entregué una sonrisa.

So closeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora