Parte 1.

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Eran las 9 de la mañana de un día Sábado, Jean y Marjorie vendrían por mi a las 11, para ir al instituto. Me propuse levantarme, tomé una ducha, me vestí con mi típica ropa pantalones negros, bototos, una polera ancha y mi chaqueta de cuero.  Me peiné y sequé mi cabello sin peinarlo, era ondulado y largo. Estaba a punto de salir cuando recibí una llamada.

-Hola, quién habla?- dije, un poco agitada por bajar las escaleras apurada a contestar.

-Hola?, soy Nicolás, tu primo, me recuerdas?- dijo con esa voz, que me sonaba totalmente desconocida.

-Mmh, hola, no la verdad no te recuerdo. Qué quieres?- dije, no me parecía extraño, tenía mucha familia la cual no conocía y mucha la cual no recordaba. Aunque por dentro me inquietaba que me llamara. ¿Cómo había conseguido mi número?.

-Voy a ir por ti al instituto hoy, Nicole me pidió que te recogiera para traerte hasta acá, soy hijo de Lis, la recuerdas? te cuidaba cuando pequeña...- Nicolás aun no terminaba de hablar y yo lo interrumpí quejándome. -Si la recuerdo, pero a ti no, además ya tengo planes, muchas gracias pero no, y dile a mi madre que no conseguirá arruinar mis planes esta vez- dije gritandole al celular, mientras colgaba la llamada. 

El día pasó muy rápido, y en la última hora, me llamaron de la dirección del instituto. La secretaria me miró y solo dijo -Señorita Ambar Heskey, la buscan en la entrada, vaya con sus cosas y retirese por favor- La miré extrañada y pensé en ese tal Nicolás del cual no me acordaba y en mi madre, otra vez, había conseguido arruinarme una cita con el chico más popular del instituto Louis Tomlinson. 

Salí y me encontré a Nicolás en su Jeep, oh dios mio, me encantaban los Jeep. Lo miré, era guapo, no recordaba tener familiares tan guapos, pensé. 

-Heey! debes ser Nicolás, verdad?-le dije de forma simpática.

-Si, yo... Nicole igual me envió. Lo siento- dijo un poco nervioso.

-No te preocupes, suele arruinar mis citas- dije quejándome. El rio de forma simpática.

-Vamos?- me dijo mirandome sonriente y me abrió la puerta del Jeep. 

Me subí y luego le sonreí para decirle -Un Jeep Rubicon, tienes buen gusto, primito- Él solo me miro se sonrió y partimos hacia su casa. Al llegar vi un mustang estacionado que llamó mi atención, era una casa enorme y tenía un patio increíble que lucía perfecto con ese auto. Entramos, y miré a mi madre con odio, luego saludé a Lis, con un abrazo apretado para que luego me dijera -Mi niña, que grande estás, no creo que recuerdes a Nicolás, pero estoy segura que serán grandes amigos, solo tienen 2 años de diferencia- Sonrió levemente para luego mirar a Nicolás esperando su respuesta. 

-Claro que si, veo que es muy simpática- Dijo él con tono burlón para luego abrazarme con un brazo por encima de mi hombro. Yo lo miré desconsertada, él parecía haber confiado en mi enseguida. 

-Oh, eso lo dices porque no la conoces, es una chica muy mala- Dijo mi madre, yo la miré con odio y luego ella siguió -Le gusta leer, el futbol y no es nada amorosa cuando alguien trata de pasarse de listo con ella, no es así hijita?- me miró y soltó una carcajada. Yo la miré enojada. 

-Bueno, puedo ir afuera a leer?- dije para no responderle a mi madre enfrente de Lis, ella siempre fue buena conmigo y siempre me regañó por responderle a Nicole.

-Sigueme, te mostraré algo mejor que leer- Me dijo Nicolás, con voz picara. Yo lo miré en forma extraña, este chico comenzaba a comportarse raro.

Salimos de la casa hacia el patio, caminamos y me hiso pasar por una cerca que estaba rota. Yo solo lo seguí, llegamos a un sitio donde había solo pasto, era muy lindo. Aunque luego empecé a notar mucho ruido y entonces rompí el silencio y me quedé parada.

-Hey, dónde me llevas?- le dije con una mirada confundida.

-Solo sigueme primita, te presentaré a unos amigos. Nicole ya me comentó que eres muy rebelde, así que te sentirás cómoda aquí, no te preocupes- Me miro de nuevo de esa forma pícara. Mientras caminabamos yo pensaba "mi madre se encargó de mostrarle lo peor de mi a este chico; si dice llevarme a ver a chicos malos, espero encontrarme con Louis, era bastante rebelde...". Una voz interrumpió mis pensamientos, era un chico, con voz ronca, ojos verdes plateados,  y un físico notable, estaba buenísimo!. 

-Hey chiquita, ¿Qué hace una muchacha como tú por aquí?- dijo él, con su voz ronca, que puso mis pelos de punta.

-Vengo con mi primo, señalé mostrando a Nicolás que iba más adelante.

-Ah tu eres a quien nos iba a presentar. Me adelantaré, soy Harry Styles- dijo y luego besó mi mejilla, sentí un escalofrío y pude notar que mis mejillas tomaron color. 

-Hola, soy Ambar- dije y sonreí un poco cortante. No me gustaba como este chico me había echo sentir, no, eso no era común en mi. 

Llegamos donde estaban todos sus amigos, me presentaron, solo recuerdo algunos nombres, Zayn, Niall, Liam y por supuesto, Harry. Y algunas chicas, Marion, Vannia y Cote. Saludé a todos y me senté para conversar con Nicolás, él comenzó a preguntar por mi cita de hoy, le comenté que era con Louis y me dijo que ellos lo conocían, antes eran amigos, y el se alejó por sus malos pasos. Mientras conversabamos sentí que alguien me miraba, era Harry, me parecía un idiota que se hacía el lindo con todas. 

-Eres muy guapa, te podría dar un beso en este mismo instante- escuche su voz ronca, y pensé ¿En qué momento llegó aquí?.

-No, gracias. Idiota- dije un poco enojada y susurré lo último esperando que lo escuchara pero tratando de que simplemente pasara. 

-Oh no me digas que me llamaste idiota- bufó enojado Harry, su voz se hiso más ronca y más profunda. 

-Si, te lo dije, te lo repito? I DIO TA- dije de forma pausada y levantando la voz. 

-Acabas de comenzar una pequeña guerra entre nosotros chiquita- me susurró al oido con su voz más ronca aún. 

-Perfecto, ¿Quieres jugar Styles?, Eso del chico bonito, no me convencé. Tendrás que mover tus neuronas y pensar un poco más, antes de hablar conmigo- bufé enojada y mirandolo con desprecio.

-Rayos- dijo exaltado -Eres más inteligente de lo que pensaba chiquita, pensé que como todas, no te resistirías a mi- Aún no terminaba de hablar y comencé a decirle muy despacio -Mira idiota, yo no soy de esas chicas cualquieras a las que le hablas bonito y se van a tu cama. Quiero un chico con neuronas, porque pene todos tienen- dije lo último con un enfasis especial, y todos me miraron. Harry me miró y le hice un leve desprecio, el sujeto mis hombros y me beso.

Una Relación Diferente.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora