Murió una estrella

10 0 0
                                    

Después de escribir, sobre tu piel mi poesía, después de vivir junto a ti como en un mundo de fantasía, hoy se deslizan mis sentimientos sobre las sombras de tu melancolía, vida vacía desgastada en busca de tu armonía, nació un nuevo día, solo con mis recuerdos refugiado en tu silencio, si vendiera mi alma para tí no tendría precio, coloreas mi corazón con el pincel de tu besos, borras mis penas, soporto naufragio de nostalgia saliendo ileso, dejame soñar despierto para que no te vayas mientras duermo, eres la medicina que le falta a este niño enfermo, suspiro para robarte lágrimas de amor si estoy lleno de vacío es porque me eclipsa mi propio dolor, dedico mi soledad para llorar por ti, ya no puedo estar sin tí, te fuiste llevándote la razón de mi existir. ¡No puedo quererte! - aunque me muera, ¡Necesito pensar! - aunque no pueda, ¡Que necesito olvidar! - pero no sé de que manera.

Dime si valdrá la pena la espera, tus sentimientos cambiaron, tu corazón no late, por mí quedarme al margen es lo que me queda, quizás eres mejor que yo o lo que daba no era suficiente, te querré eternamente aunque no vivas junto a mí en este oscuro presente, ya no me importa si me dices que no me amas soy feliz recordándote, soñándote, hablándole de ti a mi almohada. Después de tí, queda muy poco de mí, si tenía sed me saciaba con tu cáliz, desilusiones borraron sueños, puse empeño por alcanzarte, dueño de tus caricias nadie me enseñó como volver a conquistarte, en mi corazón hay un altar donde rendí homenaje a tus encantos, en este mar la sal de mis lágrimas devoran mi entusiasmo, no puede cansarse de esperar, aunque no se cansa de mirarte, mi corazón se parte, esperanzas frágiles pueden empujarte a acabar sol, a hundirte en el lodo en una tristeza de vidrio que brilla mas que el oro.

Paseo por los escenarios de nuestro romance, sentado donde te besé por primera vez solo en mis pensamientos estás a mi alcance, tal vez, no te merezco ni tu me mereces, me estremece ver que se entristece mi ser y sin tí perece. Quizás no respiro tranquilo porque me falta un corazón para dedicarle mis latidos y se parte en un suspiro, ando fugitivo de tu sonrisa, todo se hace trizas en mi entorno por no ver el suelo que pisas. Siento que me hundo, llenaste de preguntas mi mundo, buscando respuestas perdí el norte ahora voy sin rumbo, es triste saber que seguiré amándote pero solo en mi memoria, es triste tener un sentimiento desatendido porque olvidaste nuestra historia.

Desperté y la realidad venció al sueño, derramé un llanto muy grande para un mundo tan pequeño y solo queda aceptar la realidad, ya no estás junto a mí y solo puedo llorar por este final fatal. Una noche yo lloraba y "murió una estrella" mi cuerpo se rompió en pedazos recordando las caricias de ella, solo me queda recordarle, tengo miedo de que mi alma me abandone y salga a buscarte, otro día más que se va por el desagüe, exhibo una máscara de felicidad porque mis rostro es miserable , ¡Ya es tarde! no se puede rectificar, mi corazón me odia porque me grita ¡Deja de llorar!, te perdí como se perdió mi vida buscando sueños que no existieron, añorando momentos que no volvieron, estoy sumido en un profundo diálogo interno, ya no siento frío ahora soy el invierno, quiero cerrar los ojos y olvidar este dolor, quiero mirar a mi alrededor y no sentirme solo ¡Por favor!, con una explicación no quiero sentir temor ¿Dime por qué dejaste que se detuviera mi corazón?, soy un soplo de aliento que se gasta en el tiempo y el tiempo pasa lento, me asfixia la calima de este sufrimiento; melancolía, ahora esta vida vacía que camina sin guía y la ilusión perdió ritmo porque olvidó su melodía, nada a la deriva por la sangre de esta herida, dale significado a esta vida, quiero encontrar una salida, es difícil seguir el camino porque no veo tus huellas, es duro pensar en mi destino sino brilla aquella estrella.

                                                                                                                                                            Autor: Sark

Murió una estrellaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora