Esta es una historia de amor en la cuál las cosas no siempre son lo que parecen, en un momento en el que divorciarse de Jongin parece ser la única solución , Kyungsoo encuentra una misteriosa carta escrita por su padre antes de morir que lo hace du...
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>>>>>>> La lluvia que salpicaba la ventana del autobús dejaba pequeños rastros, gotitas esparcidas que brillaban como trozos de cristal separándose, volviéndose a unir, dejando tras de sí ondulantes carreteras de humedad, el frío le calaba los huesos y aun así el calor que hace unos momentos había depositado en su interior el beso de Kai no se apagaba, comenzó como la llama de una vela en su pecho, una llama tan pequeña que la más leve brisa podría apagar pero el chico moreno la mantenía encendida entrelazando sus delgados y fríos dedos entre los suyos, con su cabello castaño goteando en su ya muy empapado hombro.
Un suspiro por parte de Kyungsoo empañando el cristal, el movimiento constante de un inquieto dedo acariciando su mano, casi como si pidiera permiso, como si temiera apagar la llama encendida con la brusquedad de un movimiento más osado, con el aliento de un susurro, quizá por eso permanecían en silencio mientras el autobús recorría las calles del centro y las farolas pasaban por la ventana como estrellas fugases que se precipitan en sentido contrario, estrellas de colores en el último asiento de un autobús casi vacío. Necesitaba otro beso.
-Kai-Le llamó con voz suave, casi como una caricia.
El moreno abrió sus ojos y se incorporó, la punta de su nariz casi tocaba la suya, no quería decírselo, sería muy vergonzoso, solo esperaba que Kai entendiera la situación en la que lo estaba poniendo, el dedo con el que kai acariciaba con insistencia el dorso de su mano, subió hasta sus labios y los delineo con la forma acorazonada tan característica. Lo apartó solo para sustituirlo con su boca, el suspiro que salió de ella avivó el fuego en su interior como si la saliva de Kai fuese gasolina, cosquillas en el paladar y una sola respiración, la pantalla del autobús marcó la siguiente estación.
Descendieron y la lluvia había cesado, se mantuvieron caminando muy cerca dándose calor.
-¿Cuándo fue?- Kyungsoo rompió el silencio que se había instalado entre ellos como muestra de complicidad.
-¿Cuándo fue qué?-Preguntó Kai aunque ya lo sabía, sabía a qué se refería solo estaba tratando de ganar tiempo.
-¿Cuándo te diste cuenta de que te habías enamorado de mí?
No pudo reprimir una risita, quizá por nervios, quizá porque esa situación de por sí era extraña o tal vez fue solo porque estaba feliz de poder sostener la mano de Kyungsoo de esa manera mientras caminaban sobre la acera.
-¿Por qué te ríes?-En ese tiempo su humor era aún más inestable, frunció el ceño sintiéndose ofendido.
-Es que cuando lo dices así suena en verdad pretencioso.-La sonrisa de Kai era linda, pero en ese momento le causó enfado, trató de apartar su mano pero Kai fue más rápido y la aprisionó como un cangrejo.
-Si esto es alguna clase de broma…
-No estoy bromeando-Le aseguró-¿Quién bromearía con algo como esto?
