Necesario dolor es
Aquel que promete calma.
Si bien ahora el hierro quema,
Debido a tu ausencia,
Muchas veces se fundió en mi,
Cuando tus manos lo tocaron.
Es tu presencia un dulce veneno,
Al cual me entregó entero,
Pero esto amada mía
Es placebo de día
Y de noche...
De noche Agonía.