Our History

Capitulo 3

Después de dejar a Marinette en el salón de clases, él se fue hacia una esquina en la cual siempre comia, solo, o bueno, casi solo ya que ahora Plagg estaba a su lado y le hacia compañia. Llego a su esquina de siempre, saco su comida y empezo a comer.

- Niño, ¿no me vas a dar mi cambembert?
- ¿Qué te he dicho de salir en la escuela Plagg? - dijo con cierta molestia el rubio
- Que no lo haga, pero, siempre estas solo, no te juntas ni comes con nadie, así que, creo que puedo salir como se me antoje - dijo el Kwami volando a su alrededor
- Toma - dijo el rubio dandole un gran pedazo de cambembert - ahora escondete

El kwami tomo el queso y se lo comio demasiado rapido, se le quedo mirando mientras este comia, siempre se preguntaba por que estaba solo, admitia que solia ser egocentrico, pero lo hacia por la falta de su madre, él sabia que en el fondo Adrien era bueno.

Adrien se quedo mirando a su kwami de reojo mientras comia, no podia comprender como habia llegado Plagg a su vida, pero lo que fuere lo agradecia al menos ya no se sentia tan solo, pero eso jamas lo admitiria en voz alta, se le quedo viendo un poco más cuando empezo a escuchar pasos y susurros acercandose.

- Plagg, Plagg - no respondia - ¡¡PLAGG!!
- ¿Eh?
- Escondete, creo que viene alguien
- Esta bien - dijo metiendose en su chamarra
- ¿Por qué te tardaste tanto en salir? - dijo una voz de ¿chica?
- Agreste

Termino de escuchar su apellido y se imagino a la dueña de tan melodiosa voz, con su pelo azulado, sus ojos azul como el mar y sus labios, sus bellos labios rosados, definitivamente la chica de sus sueños, cuyo nombre era el más hermoso que jamas habia escuchado, exacto hablaba de Marinette, tan valiente, tan perfecta, hablaba de algo con la que supuso era Chloe, intento escuchar lo que decian pero no alcanzaba a oir bien.

- Asi que ahoras espias chicas, haz caido muy bajo Agreste
- Y tu me espias a mi, eso es todo un honor Lahiffe

Dijo mientras veia a Nino Lahiffe, era un chico moreno, con ojos claros, siempre traia puesto un gorro y una playera azul, con la imagen de un como ojo tambien usaba unos lentes negros, como odiaba a Nino Lahiffe, hasta le caia mejor el cabello de tomate que Lahiffe.

- Honor seria no ver tu rostro en cada esquina - expreso el moreno
- ¡Oh vamos! Admite que te encanta
- En la realidad lo detesto, como todo Paris
- En el fondo me aman
- Desearias eso

Dicho esto el moreno se dio media vuelta y dejo nuevamente a Adrien solo, se quedo en su esquina hasta que tocaron para que entraran nuevamente a clases.

Las clases siguieron su curso con normalidad, Adrien no podia esperar a que tocaran para la salida, cuanto ansiaba volver a su cuarto y acostarse a dormir, que bueno que ese día era... ¿jueves?, reviso su celular y noto que era viernes, ese día tenia que quedarse a sus clases de esgrima, lastima, su cama tendria que esperar un poco más de lo debido.

Dieron el toque que daba por terminada la jornada de clases, los alumnos salieron de la escuela en los tipicos grupos de amigos, Adrien se dirigio solo a los lockers en donde guardo sus cosas y saco lo de esgrima, se dirigia al baño para cambiarse cuando en las alturas observo una figura negra con motas rojas que se alejaba velozmente mientras dejaba el caos a su alrededor.

- Al parecer Ladybug ya quiere hacer el trabajo sin el gato - dijo a sus adentros - podria ir a clases o ver a tontabug pero no ir a clases - penso - todo por no ir a clases

Adrien se metio al baño y se transformo en el villano Chat Noir, Chat alzo su bastón y se dirigio en donde estaba Ladybug, saltaba por los tejados, sintiendose libre hasta que oyo a su compañera.

- No puedes vivir sin mi, ¿verdad Chaton?
- ¡Ugh! Hola
- Asi que si sirvio la indirecta
- ¿Cual?
- En la que yo causo destrosos, tu vienes y te enamora y nos casamos y vivimos felices
- Deberias ir más lento, jamás me enamorare de ti
- Eso dices tú, pero algún día lo haras - suspiro - mientras ¿esta listo para ir a sembrar el terror en Paris?
- Naci listo

Fue lo ultimo que dijo el ojiverde antes de ir con Ladybug a arruinar el día.