A veces pienso que el no es real. A veces pienso que la vida fue demasiado generosa conmigo, o que en otra vida habré hecho algo realmente maravilloso para tenerlo a mi lado... Si, el me tiene así, sonará un poco... Sobrevalorado? Quizás si, quizás no, pero desde mi punto de vista, es el ser más maravilloso que existe y que mis ojos tienen la dicha de ver, de tocar, y de sentir. Hay placeres en la vida que no muchos tenemos la oportunidad de disfrutar, y no me refiero a ese placer que sentimos cuando obtenemos aquel objeto que siempre anhelamos, o cuando tenemos un buen sexo con alguien realmente caliente al que llevaste tiempo deseando.. no, no es ese tipo de placer.. es más bien el hecho de estar con la persona que amas a tu lado, de poder contemplar cada detalle de su existencia, y sentirte realmente afortunada de compartir tu vida con esa persona, así que soy afortunada, realmente afortunada de tenerlo a él a mi lado. Cada vez que lo miro dormir como lo está haciendo en este preciso momento, siento que es un ángel, mi guardian, siento que mi corazón va a estallar de solo mirarlo dormir, tan pacífico, con sus ojos cerrados, sus facciones relajadas, su lenta respiración, sus voluptuosos labios, y su piel tan tersa.. se ve tan relajado, tan sereno, y me veo tentada a tocarlo, mis dedos cosquilleaban de solo sentirlo, de sentir su piel contra la mía, y me atrevo a dibujar sus facciones con las yemas de mis dedos. Comienzo con su frente, acariciando suavemente aquella piel iluminada por los rayos del sol que se colaban en la ventana de nuestra habitación... Mis dedos siguen su recorrido por sus mejillas, y lo acaricio con la palma de mi mano, suavemente, porque semejante belleza debía sentirse por completo, aunque me asusté un poco cuando comenzó a moverse, pero luego de un instante y un suspiro de su boca, siguió durmiendo, por lo que no me detuve y seguí acariciando su rostro llegando hasta sus labios. Si había algo que me encantaba, eran los labios de Jimin, suaves y rosados, voluptuosos y tentadores, y mis dedos aprovecharon a deleitarse con su tacto.
El era tan hermoso, que me robaba el aliento, suspiré y me animé a acercar mis labios a los suyos, mi mano volvió a su suave mejilla y deposité un beso suave, que me dejó con ganas de más, pero no quería despertarlo, por lo que me acurruque más cerca de su cuerpo, y su aroma invadió mis fosas nasales, no había nada mejor que estar a su lado y sentir su piel contra la mía, todo sin dejar de romper mi contacto visual contra su rostro... De pronto enrojeci de la vergüenza, porque abrió sus ojos pillandome desprevenida, y me sonrió como solo el sabía hacerlo, con sus hermosos ojos achinados y su hermosa sonrisa que solo hizo que me sonrojara todavía más.
-ya terminaste?-me dijo divertido,
-Disculpa?-
-Te estás aprovechando de mí, me has besado, descarada- y soltó una carcajada, contagiandome su risa
-te ves tan adorable cuando duermes- dije un poco tímida.
-Te ves tan adorable sonrojada- dijo, solté una risa nerviosa y me escondí en su pecho..-Te amo- agrega,-te amo muchísimo, despertar a tu lado es un sueño hecho realidad-
Salí de mi escondite y lo miré a los ojos, esos ojos profundos que hace que me pierda en ellos. -Te amo mi amor, soy tan afortunada de tenerte- y me besó de manera lenta y suave, arrastrando mi cuerpo con sus brazos hacia el suyo, anulando cualquier distancia que nos separara.. podría estar así toda mi vida, rendida a sus pies, porque simplemente, Jimin estaba hecho para volarme la cabeza, llevarme a otra dimensión con solo un susurro y un beso suyo, para matarme y revivirme al mismo tiempo, llevándome al mismísimo cielo donde aquel ángel me envuelve en sus brazos para fundirnos en un solo corazón, en un solo suspiro, quitándome el alma al mismo tiempo. Simplemente Él.
