Capitulo 1

14 1 0
                                    

Sabado; 1.40pm

Despues de haber superado otra semana, llegaba el tan esperado fin de semana: el dia en que toda la familia se reuniria en casa. Y claro que le emocionaba a Savannah, pero aun mas a las niñas, ya que ellas no debian pasarse la tarde cocinando para muchos invitados... y si que serian muchos esta vez... repasemos la lista de invitados: madre y padre de Savannah -Morgan y Erik-; su hermana Lidia -la menor- quien vendria con su esposo y sus dos hijos -Christopher y David-; sus tios de parte de su madre -Claude y Eva- y los de parte de su padre -Julio y Sabrina, Samuel y Carol-
Y no olvidaremos mencionar a su mejor amiga -Alicia, a quien claramente invitaba a todas las reuniones- quien venia con su novio -Christian- y su pequeño hijo -Joey, quien tiene la misma edad que las gemelas-... supongo que no olvido mencionar a nadie... vale recordar que cada uno de sus tios venia siempre con sus hijos (y dos de ellos son adultos ya, cada quien con su pareja, uno de ellos con dos pequeños y el otro esperando a que nazca) ¡Dios! Si que serian varios invitados, lo que lleva hacia algunos puntos:
1) mucha comida que hacer
2) se acostaria muy tarde
3) mucho que limpiar al dia siguiente
Digamos que, la que menos le preocupaba a Savannah es la numero dos. Y aqui se encuentra, caminando por el mercado: empujando el carro de las compras con Bradley en el bolso de bebé que colgaba en su pecho y a las gemelas caminando una de cada uno de sus lados... ese era un buen punto a su favor... las pequeñas se comportaban mas que bien al tener que salir, cosa por lo cual las felicitaba y premiaba, ya que casi todos los dias veia como otros padres luchaban con sus niños para que se comportaran.

-¿Que postre prefieren hijas?- dijo parandose frente a la gondola

-¡Helado!- gritaron ambas sonriendo

-de acuerdo- rió ella al verlas brincando de alegria -¿Que sabor será?- pensó viendo las heladeras

-¡Frutilla!- dijo Chiara

-¡Chocolate!- pidió encima Charlotte

-de acuerdo- rió -llevaremos de ambos ¿Vale?- las miró -y añadiremos el sabor de vainilla y dulce de leche-

-¡Siii!- festejaron ambas

-okey- las veia riendo mientras de pronto calmaba a Bradley quien comenzaba a llorar -ahora vamos rapido, que su hermano tiene hambre princesas- ambas asintieron y caminaron directo a la caja para pagar todo

The babysitter of my babiesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora