CAPÍTULO II

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Luego del accidente en el cumpleaños de Jongdae, no volví a ir a su casa como por dos meses e ignoraba a Kyungsoo en la escuela, yo estaba en mi último año y él un par de grados por debajo. En realidad antes no hablábamos en la escuela, pero evitaba incluso encontrármelo por los pasillos. No sabía qué decirle o siquiera cómo mirarlo.

Sin embargo, no se puede evitar al hermanito de tu mejor amigo por siempre. Los días miércoles el entrenamiento de rugby y el entrenamiento de voleibol chocaban, podíamos ver a los jugadores de voleibol correr alrededor del campo antes de irse a su propia cancha, mucho más pequeña que la nuestra.

Yo estaba descansando cuando lo vi entrar a la pista, llevaba unos shorts negros y la camiseta de la selección escolar de color azul marino. Siempre nos saludábamos cuando nuestras miradas se chocaban, pero esta vez jamás nuestros ojos se cruzaron, a pesar de que lo seguí con la mirada por cinco minutos.

Evidentemente, también coincidíamos en los vestidores, usualmente teníamos turnos, pero Kyungsoo siempre tardaba más que sus compañeros. Todo el equipo de rugby conocía a Kyungsoo, es muy popular en la escuela porque participa en los concursos de canto, es el capitán del equipo de voleibol masculino y desde que tiene trece años sale elegido como príncipe en las alianzas escolares. Baekhyun salió rey ese año.

Cuando entré su bolso estaba sobre una de las bancas, así que me escabullí a una de las duchas rápidamente, tardando más de lo normal, de forma que al salir él ya no estuviera ahí. Pero, claramente, Kyungsoo no estaba tratando de evitarme como yo a él. Estaba sentado junto a mi bolso, los demás chicos casi todos habían terminado ya.

Cuando Kyungsoo me miró me sentí extraño, levemente caliente. Recorrió con sus grandes ojos mi pecho desnudo hasta caer en la toalla que envolvía mis caderas. Bajó la mirada a su regazo y yo quise azotarme la cabeza contra uno de los casilleros, recordando las palabras de Baekhyun. ‹‹Debes hablar con él, no puedes ilusionarlo, Chanyeol. Jongdae te mataría.›› Claramente, Jongdae no tiene idea de que me lie con su hermano, aún no lo sabe, jamás se lo dijimos.

Recuerdo que me senté junto a Kyungsoo y esperamos a que el último chico dejara el vestidor, nadie nos miró, después de todo, Kyungsoo es el hermano de mi mejor amigo. Joder.

Mi cuerpo se secó con el aire del vestidor y Kyungsoo seguía mirándose las manos sobre el regazo, tenía el pelo mojado aún y pequeñas gotas caían sobre sus pantalones azul marino de la escuela.

"Deberías secarte el pelo" Le dije, tomando la toalla que tenía en el cuello para poder hacer el trabajo, pero se alejó.

"¿Te arrepientes?" Me preguntó, su voz parecía asustada y mi corazón se apretó.

"Kyungsoo..." Empecé, pero antes de poder continuar escuché un suave sollozo.

"Ya no soy un niño." Susurró, volteando a mirarme con sus ojos rojos por las lágrimas.

"Sigues siendo el hermanito de Jongdae." Le dije, limpiando una brillante lágrima que recorría su regordeta mejilla.

"No pensaste eso cuando estábamos en la cama." Murmuró, dejándome completamente perplejo, no podía negar eso. "Me tocaste y me besaste." Dijo con una voz más firme esta vez, tomando mi mano para llevarla a su entrepierna.

"Kyungsoo, escúchame." Dije quitando mi mano. "Sé lo que hice y estuvo mal. Mira, eres hermoso, fue... fue lindo lo que pasó. Gracias por darme tu primer beso, pero... no puedo hacerle esto a mi mejor amigo, ¿entiendes?"

No sé si no me di a entender bien, pero en vez de recibir una respuesta, montó su cuerpo sobre el mío, sentándose en mis piernas y abrazándome por el cuello.

Out of Our Minds (CHANSOO)Where stories live. Discover now