Solo,
mirando el ocaso,
Pienso en tí.
Comparo el multicolor
Con el bello recuerdo de tus labios pálidos, tu cabello oscuro y el infinito y brillante claroscuro de tus ojos.
Te extraño, no puedo negarlo,
Porque ahora más que antes me he apegado a tí, y tu viva ausencia me apuñala de frente.
Petrificado y sin fuerzas para detenerla, siento cómo me mata poco a poco, pero jamás me había sentido tan vivo.
Y ahora que estas aquí, ruego por que no te marches.
No se si sea prudente decirlo,
Y no si sea muy pronto
O muy tarde,
Pero he comenzado a pensar en tí a cada momento,
He comenzado a extrañar tu voz, tu sonrisa, tu persona.
Creo, para mi pesar, que he perdido mi libertad,
Creo, amor mío,
Que he comenzado a amarte.
