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Pese a todos los escenarios para los que mi cabeza estaba preparada, no tuve otra visita más que la de ella.

Entonces fácilmente hice algunas suposiciones.

Quizá no tenía famila o me odiaban. Porque la única que venía a verme era ella. Solía asomarse y preguntarme si podía pasar. Estaba una o dos horas conmigo y salía a comer cuando entraba algún doctor o enfermera a revisarme o a encargarse de los asuntos como mi aseo personal. Estaba más que segura de que me había accidentado, porque tener varias partes del cuerpo destrozadas no era para nada normal.

Seguía teniendo dolores de cabeza, y algunos recuerdos borrosos más. Cómo sueños o locas fantasías. En una me veía llevando a una chica conmigo, no se ni siquiera a donde, pero estaba tan feliz de poder ayudarle. Otros eran más recuerdos de gente que no había visto nunca desde que desperté.

Me llene de información sobre ella. Sabía que trabajaba en algo sobre la educación, porque hablaba de clases en una escuela y sobre ser la próxima directora. Le gustaba comer ositos de goma, en especial los rojos. Dijo que nuestra primera cita había Sido ir al cine, aunque jamás dijimos que era una cita realmente segun sus palabras. Segun sus historias ambas sabiamos bien que nos queriamos a pesar de que no muchas veces hablabamos de eso. Y segun las mismas, yo solia desaparecer por algunos ratos, pero volvia siempre a ella. Nunca especificaba tanto. Solo decia cosas que yo queria saber. Como si tuviera que hacer las preguntas correctas para obtener todo.

También habló sobre viajar por el mundo en algún momento con su padre, pero nuevamente. No tenía ni idea de cómo podría lucir esa persona.

-¿Cuánto tiempo estaré aquí?

Se me ocurrió preguntar.

Con el pasar de los días, no veía mejora en mi cuerpo, aún tenía grandes hematomas en la espalda y me costaba moverme. Cómo si mi cuerpo entero hubiera recibido un fuerte golpe.

-¿No te gusta estar aquí?

Y por alguna razón, pensé que decirle que no la haría sentir mal.

-Puede que este comenzando a gustarme. ¿Vendrás todos los días?

-Lo haré solo si tú quieres.

Por algun motivo comence a tomar una idea, no estaba segura. Algo en ella me empujaba a creerlo. Quiza sus reacciones al ver que tenia alguna molestia y se apuraba a ofrecerme su ayuda. O tal vez era el hecho de que ponia mucha atencion en hablar conmigo, contestar mis preguntas y saber mis pensamientos. Aunque mis preguntas eran mayormente sin irrelevancia. Podia pasar de "¿Cual es tu color preferido?" a "¿Conozco a tu papa?" o podia solo indagar sobre mi vida. Quiza era un poco raro de mi parte, pero habia ocasiones en donde sentia que ella leia mi mente. Cuando pensaba que seria bueno que pudiera salir, ella comenzaba a hablar y hablar como si no tuviera nada mas que hacer. Al punto en que mis ideas de salir eran sustituidas. Podia tener sed y ella casualmente iria a traerme un jugo porque ella igual la tenia. 

Me hacia sentir tan extraña. Mire entonces a mi alrededor. ¿Que hora era? Mas importante.

-Oye, Mei. ¿Que dia es hoy?

Entonces ella dejo de verme con mucho amor. Lucia totalmente confundida. 

-¿No lo sabes?

-Creo que no te lo preguntaria si lo supiera. No me malentiendas, adoro tu voz pero me gusta mas escucharte hablando de ti que del dia o del clima que hay.

-Bueno, creo que es sabado.

Ella sabia que su respuesta no me complacia. Aun asi, esa fue la primera vez en donde no se encargo de aclararme la respuesta. Y siendo yo, no tenia ganas de preguntar de nuevo.

En ese momento, en medio de mi cama y con el cuerpo lleno de golpes y heridas, me pregunte si toda mi vida habia sido asi de amargada. Tan seca y falta de vida. Podia verme a mi misma sonriendo al estar con ella, pero incluso cuando las enfermeras venian solo tenia ganas de dormir. Dormir y no despertar hasta que ella volviera, me diera los buenos dias y comenzara a hablar conmigo. Odiaba el olor a desinfectante, odiaba el ruido de las personas pasando fuera  de mi avitacion con esos zapatos blancos que hacian sonar sus zuelas con las prisas de las enfermeras. Odiaba la luz de las lamparas sobre mi piel, odiaba mi cuerpo malherido y odiaba todo lo que no fuera esa chica.

No odiaba su compañia ni su voz autoritaria. No odiaba sus platicas sobre colegios o sobre nuestro tiempo juntas. Ni siquiera odiaba que ella solo contestara "Sabado" cuando yo queria saber la fecha exacta.

Sabado... sabado, sabado, sabado...

-¿Hoy es sabado verdad?

-Si, es lo que dije

Ella estaba jugueteando con sus manos y mire el mismo  reloj caro en su muñeca. Estaba congelada, al igual que ese pequeño aparato. 

-Oye, Mei... ¿Qué me paso?


Ok, contare algo que acaba de pasar hace unos minutos XD alv (notese el caracter mexicano en el alv XDD)

Estaba aqui en mi ordenador escribiendo feliz de la vida porque ¿Quien escribe a las 3:00  am? Pues yo (porque conversaciones gays y llenas de unicornios que me quitaron el sueño) el punto es que estaba aqui  con toda la calma y de repente se movio una silla de madera en mi cuarto. Estoy segura de que no estoy en drogas (hoy lol) solo la mire, me quede como "vaya, si que fue un ruido feo" y volvi a escribir. ¿Deberia tomarle mas atencion? La respuesta en mi cabeza fue un obvio "Nah"

Melancholy hill.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora