Llantos sobre deudas

Capitulo 1: Desiciones

Estaba tan feliz, ingresare a la Universidad que tanto quiero estar. Tan solo me falta ser independiente he irme de esta casa.

.- Soledad, ven a la mesa para que hablemos como familia.

.- ¡¡Bueno madre!! exclamo esta joven.

Soledad estaba tan ansiosa por quererle decir a sus padres lo tanto que queria.

.- Bueno hija, ya estamos aquí, tu padre y yo. ¿Qué es lo que tanto nos quieres pedir?

Soledad entre nervios:

.- Como empezar, como saben ya, empezare a ir a la universidad, por lo cual quiero ser mas independiente, he irme de esta casa, y arrendar una casa por Providencia, y asi estudio y trabajo.

El padre le exclama con un tono de enojo:

.- ¿Y tú?, ¿ que te crees?, apenas tienes 18 años y ya te quieres ir de aquí mal agradecida, sal de aquí ¡¡PENDEJA!!

Soledad entre llanto se fue a su habitacion, ya estaba muy estresada con su padre y su madre que lo unico que hace es hacer lo que el esposo le dice.

Saca su navaja y empieza a desahogarse como todas las noches.

Al día siguiente Soledad se levanta, escucha griterios por los cuales desea escuchar lo que estan discutiendo.

.- Y tú, ingrato, animal, que te crees. María la madre de Soledad

.- ¡¡Callate!! tú tan solo eres una puta incredula, lo unico que quieres es mi dinero. Dandole una golpe a su esposa. Don Ignacio.

Soledad no queria ver mas, y decidió irse de la casa y enfrentarse a sus padres.

Empezo a empacar sus cosas, y guardo su dinero que tenia guardado hace años.

Se ducho, bajo sus cosas, las hecho al auto y fue donde sus padres, estaban en la pieza de ellos.

.- Oye Maricón, me voy de esta puta casa, y no me busques, no quiero tener contacto con alguien como tú.

Eres un perro padre, un ¡¡Perro!!

El padre se para de la cama, agarra su botella y le grita a Soledad:

.- ¡¡Tenme mas respeto, soy tu padre, y aquí se hace lo que yo digo escuchaste!! ¿o quieres ser igual que tu madre?

Vete de aquí, no te quiero ver.

.- Tenga en mente, que mi madre lo va a dejar, y se va a quedar solo, ¡¡Pudrete!!

.- Hija mia. Exclamaba la madre.

.- No madre, y usted vayase de esta casa, la estan maltratando.

.- Adios.

Cerro la puerta, y entre los pasos, escuchaba llanto de su madre por su hija, y los gritos de maltratos sicologicos del padre que le hacia a su esposa.

Soledad sube al auto, y se marcha.