la decisión mas difícil

CAPITULO: 2 el reencuentro

Una semana había pasado desde aquel accidente, me había despertado al día siguiente sin saber donde estaba y lo más importante sin saber quién era yo. Mis padres estaban en esa habitación conmigo y se quedaron todo el tiempo tratando de hacerme recordar pero era inútil, todos mis recuerdos habían sido arrancados de mi cabeza, podía ver el dolor y la desesperación en su mirada

- Cariño hoy volveremos a tu casa ¿estás bien?

- Si mama, ya quiero estar en casa

- El doctor nos ha recomendado que no vuelvas a casa con nosotros por un tiempo, te tienes que quedar aquí para ver si tus recuerdos vuelven y puedas seguir el tratamiento con él

- ¿se quedaran conmigo?

- No podemos seguir faltando al trabajo pero vendremos el fin de semana hasta que puedas volver con nosotros

- Oh está bien- tenía miedo mucho miedo a lo que ahora me tocaría vivir

- Pero no estarás sola, Nick estará contigo, ya está de regreso y dijo que él te cuidaría

- ¿el chico de mi infancia?

- Si el que te mostramos en la foto, el es tu mejor amigo, es en el único que podemos confiar, trata tu de confiar en el por favor, llevan siendo amigos hace mas de 15 años, el te sabrá cuidar mejor que nadie, además es tu vecino así que todo irá bien ¿sí? No tienes nada que temer

- Si papa, no tengo miedo

Cuando llegamos a mi departamento nada me parecía familiar, pero todo era muy bonito, era de una habitación con una sala grande, me llamo la atención la biblioteca enorme que tenia y leí los títulos de algunos de los libros allí, no recordaba haber leído alguno, vi varia fotos con mi familia, después con una chica y otra con un chico rubia donde él me besaba la mejilla, lo reconocí por una fotos de mi teléfono parecía ser mi novio o mi ex, porque en esta semana el no había aparecido en el hospital, pero lo raro era que mi última llamada fue a él.

El timbre sonó y mi papa corrió abrir, con el entro un chico muy alto y de contextura grande, con solo verlo sabia que hacía mucho ejercicio, tenía los ojos cafés y achinados, los labios en forma de corazón y una mirada de tristeza, él era mi amigo de toda la vida, o eso es lo que me habían dicho

- ____- dijo antes de correr y abrazarme- dios mío me alegro que estés bien

- Yo- me aferre a el fuerte y sentí la misma paz que sentí cuando abrace a mis padres por primera vez- ayúdame por favor- le rogué

- Estarás bien ¿sí?- me alejo y tomo mi rostro en sus manos para hacer que lo mirara- aquí estoy yo y no dejare que nada malo te pase, te juro por mi vida

- Gracias- lo volví abrazar porque eso me tranquilizaba de una manera inexplicable

Mis padres se fueron a las dos horas y yo me encontraba muy débil y triste a la vez así que decidí ir acostarme, pero no quería estar sola, no quería que Nick se fuera. Éramos amigos así que no creía que estuviera mal pedirle que se quedara conmigo

- Estoy muy cansada

- Ve a dormir un rato, yo preparare la cena

- ¿puedes quedarte conmigo hasta que me duerma?

- Como los viejos tiempos- sonrió con tristeza- vamos- me guio a mi cuarto y se acostó junto a mi

- Mira tengo una foto contigo de niño aquí en mi mesita

- Vaya no la quitaste, ahora por favor duerme, yo te cuido

Lo último que supe fue que me beso la frente y me dijo cuánto me había extrañado antes de que yo me hundiera en un sueño profundo