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La relación que Hoseok creó con Yoongi es una relación que cree honestamente, es una que todos merecen tener al menos una vez en la vida. 

Yoongi para Hoseok era alguien que siempre estaría y todos merecemos tener en la vida alguien que siempre va estar. 

Por supuesto Hoseok tenía a su maravillosa madre, a su increíble padre, a su adorable hermana y a su noble cachorro. Por supuesto que también tenía a Namjoon, su líder preciado, a su inspirador amigo Seokjin, a sus pequeños dongsaengs Jimin y Jungkook. Por supuesto que tenía a Kim Taehyung que era en un punto algo que ni siquiera podía describir pero se sentía como una fuerza descomunal y Hoseok sabía que lo tenía incluso cuando lo alejaba, lo tenía cuando estiraba la mano que Taehyung quería tomar, lo tenía cuando rodaba los ojos al escuchar algún halago del menor, lo tenía aunque no se lo merecería y por eso Kim Taehyung no contaba en ese momento.

Tenía a army pero por mucho que quiera decir que sí, el amor de personas que realmente nunca te dan abrazos y a quienes ni siquiera miras a los ojos no es el mismo que el te da una persona que coloca sutilmente su mano en tu pierna cuando los nervios te consumen y no dejas de moverla nerviosamente, alguien que parece iluminarse a tu alrededor como no lo hace con alguien más y para quien tu existencia parece un verdadero regalo (y es mucho más tangible que con army), alguien que no te pide nada y te lo da todo. 

Hoseok también ha pensado muchas veces que no merece a Yoongi pero la cosa es que Yoongi hace difícil pensar así porque lo rescató en un momento donde estaba cansado de sentir que tenía cosas que no merecía y el mismo Yoongi le confesó que se sentía igual, que estaba harto de que su vida fuera una línea horizontal porque estaban logrando cosa grandes y él debería ser feliz pero no lo era todavía. Hoseok tenía que hacerlo feliz. 

Hubo quizás un momento cuando conocía a Yoongi y se conocía a sí mismo que pensaba que ellos dos eran completamente polos opuestos pero el tiempo le enseñó que son más parecidos de lo que cualquiera pueda creer. 

Los dos tienen pequeños pensamientos autodestructivos de vez en cuando, pensamientos que simplemente llegan a tu mente y no los puedes detener incluso si no tienen sentido. Los dos pueden pasar un par de días depresivos, demasiado ansiosos, temiendo el futuro y culpándose por el pasado, acostados en una cama, tomados de la mano sin siquiera hablar, apoyándose en el otro. Los dos a veces desean convertirse en rocas en otra vida. 

Pero ambos son las personas más fuertes en todo a bangtan, ambos han hecho un pacto para que nadie más que el otro los vea llorar y les gusta consolar a los demás, ambos se la pasan haciendo comentarios divertidos o sarcásticos sin dejar ver muchos sentimientos porque así es más fácil. Los sentimientos los dejan cuando van a la cama juntos. 

Así es como si Jimin se siente mal por su voz, Yoongi hace un comentario tonto acerca de cómo un cerdo le dijo en sus sueños que ganaría la lotería. Si Taehyung y Seokjin discuten y todo está tenso, Hoseok habla de aquella vez donde peleó con Jungkook por una banana. Yoongi apoya a Jimin y le dice que adora su voz. Hoseok hace aegyo para la cámara de Seokjin solo para hacerlo reír. Ellos son a quienes todos vienen cuando Namjoon se cansa de llevar el peso del mundo sobre sus hombros y tanto Yoongi como Hoseok los recibe con gusto. Ellos son el pilar de la banda porque sus problemas los dejan solo para ellos y está bien. 

Quizás no debería ser la meta en las relaciones, quizás dos personas no deban salir solo para llorar con el otro y consolar al otro, quizás ambos merecían algo mejor. O quizás solo se necesitaban mutuamente y lo que tenían no era perfecto pero era suyo, los hacía mejores, les gustaba y amar es estar ahí para el otro sin importar qué y eso era todo lo que necesitaban. 

Hoseok claramente se sentía feliz cuando hacía trasmisiones en vivo con Yoongi y lo veía reír con él como no lo hacía con nadie más. Se sentía feliz cuando después de un día entero aprendiendo y enseñando nuevos bailes y escribiendo, borrando y volviendo a escribir letras para su mixtape al final del día estaba Yoongi, con besos suaves y dulces, con manos enormes y cálidas, con toda la tranquilidad que era capaz de trasmitirle en una sola mirada. Se sentía feliz de tener a un alma compañera tan cerca porque era todo un milagro que en una banda de 7 miembros había dos pares de almas gemelas. Jimin y Taehyung por un lado, Yoongi y Hoseok por el otro.

 Solo que Hoseok sabía que Jimin y Taehyung no tenían el tipo de relación que Yoongi y él tenían. Y a veces no sabía si preferiría que la tuvieran en realidad a ver a veces como Taehyung aun lo miraba como un cachorro muerto de amor al que su dueño no se cansa de rechazar. 

Seeing blind, Yoonseok/ VhopeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora