Desperté y salí a la calle; de pronto note que todos actuaban de manera similar y vestían de manera muy similar, trajes negros con camisas blancas, incluso los niños pequeños; yo era la única que estaba usando un jean y una remera colorida.
Cuando llegue a la escuela todas mis amigas también vestían traje, pero no estaban hablando y riendo, si no, que estaban en sus lugares sin decir nada. Me preocupé, que estuvieran mal o que me dijeran algo por o tener traje como el resto. El día pasó y nadie hablaba, se dictaron clases sin recreo, y nadie se quejó por eso.
Cuando terminó el día escolar, fui a hablar con la directora, a la cual yo le tenía confianza y le pregunté qué les pasaba a todos, incluso a ella, que también levaba traje. Tenía una expresión vacía y lo que respondió de manera robótica fue:
"El mundo está cambiando, está matando a la discriminación, ahora todos seremos iguales, nadie diferente a nadie, seremos un mundo tranquilo y unido, solo paz y amor, nada de guerra ni ningún tipo de diferencia o rivalidad. Únete a nosotros y haz que el mundo sea mejor; todos queremos ser felices y solo hay una forma de hacer eso, dejar de ser humanos, dejar de ser diferentes, no habrá nadie único pero tampoco habrá nadie peor o mejor que otro. Si queremos ser iguale debemos dejar de ser humanos, porque el ser diferentes y únicos es lo que nos hace humanos, pero eso también nos separa y destruye, si pensamos diferente que alguien, lo alejamos, si consideramos a alguien mejor o peor que nosotros en algo, se crea una minoría; hay que erradicar eso y si la única forma es hacernos iguales e inhumanos, lo haremos únete a el cambio"
Le agradecí y asentí, luego salí de la oficina y volví a mi casa, al llegar pensé lo que la directora dijo, lo analicé y le di la razón; la mayor amenaza para la humanidad es la humanidad misma; el hombre se volvió codicioso y malo con el tiempo y la única forma de hacerse bueno otra vez, es ser iguales y que no haya nadie diferente.
No sé cómo fue que todos se volvieron iguales de un día para otro, si bebieron algo o no, pero al otro día me puse camisa y traje y actué como todos, hasta que finalmente me uní a ellos...
