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Angeline

Él era extremadamente guapo.
No debería de estar mirándolo mientras camina de un lado a otro mientras recita unas cuantas palabras del libro "orgullo y prejuicio".

Admito que es mi libro favorito, pero el placer de tener al señor Styles era tan poco. Cuatro horas a la semana se hacian tan cortas que sinceramente, quedaba con ganas de más.

Un papel vuela hasta mi rostro haciendo que busque a la desgraciada o el desgraciado.
Mi mejor amiga Lucía se encuentra riéndose y captode inmediato que fue aquella traidora.

Me indica que recoja el papel y lo abra, hago lo que me dice con cuidado para que el profesor no se dé cuenta.

"Se te está cayendo la baba"

Es lo que dice en el papel.
Me siento indignada y la miro.

—¡Eso es mentira! —le digoa Lucía, pero me tapo la boca con mis dos manos al darme cuenta que lo dije en voz alta.

Estaba frita.

—¿Podría decirme que es mentira, señorita Davies? —El profesor Harry se acerca hasta mi puesto mientras yo me muerdo el labio, asesinandome en mis propios pensamientos.

Yo, lo siento profesor —digo sonrojada.

Le lanzo una mirada a la que es mi mejor amiga, pero la traidora sólo se decía a reirse.

—Eso no ha sido lo que le he preguntado —cruza sus brazos mientras en su rostro forma aquella expresión de un poco de impaciencia—. Señorita, sino me responde, estaré obligado a dejarla en detención después de clases.

Mi boca se abre.

Nunca había estado en detención.

—Está bien —digo rendida mientras miro mis manos.

—Espero que no se vuelva a repetir —y sin más, continúa con su clase.


Angeline; matureDonde viven las historias. Descúbrelo ahora