Capitulo 7: Pequeños celos.

71 3 0
                                    

Narra Joe

Vuelvo a fijarme la hora. 12:23 hs.

Es mediodía y nadie está despierto. Bueno, supongo que es por haberse levantado a las tres de la mañana, por nuestra pequeña reunión en la cocina. Dormí poco pensando en lo que hable ayer con Nick. Podría decirle a Gabriela que la quiero pero esta ese miedo de que me rechace porque nunca demostró que sintiera la mas mínima atracción hacia mí. Siempre desvía la mirada cada vez que me sorprende mirándola además parece que evita estar conmigo a solas, siempre se asegura que alguien esté con nosotros, así que si no quiere estar a solas conmigo es porque no siente nada por mi  por lo tanto no puedo decirle lo que siento.

-Que lio…- digo untándole queso crema a mi tostada.

-Supongo que si…

Me levanto de un salto de la silla y me apoyo en la pared del puro susto.

Antonella, otra vez.

-¡Dios mío Antonella!- digo apoyando una mano en mi pecho, mi corazón parecía que iba a salirse del pecho- No vuelvas a hacer algo así…creo que me salieron canas con el susto de ayer y el de recién, hasta envejecí diez años…

Antonella volvió a sonreír.

-¿No te duele la cara de tanto sonreír?- le pregunte mientras volvía a sentarme.

-No, estoy perfectamente bien…- me dijo mientras se sentaba y me quitaba la tostada de la mano.

-¿Quieres decirme algo en especial o qué?- se está comportando de una manera extraña, desde que llegue.

¿Y si es porque escucho lo que dije anoche?

-No nada…solo quería ofrecerme como guía turística para enseñarte la ciudad…- dijo sencillamente-…va a ser divertido…

No era mala idea.

-¿No deberíamos esperar a los demás?- pregunte aunque no me gustaría averiguar todavía si alguien escucho lo que dije de Gabriela.

-Van a tardar un rato en despertarse, créeme, lo sé…- dijo acabándose la tostada.

-Bueno, vamos entonces…- dije sonriendo.

Antonella me miro de arriba abajo.

-Si pretendes salir conmigo vestido con tu pijama, yo no tengo problema pero no creo que te agrade…- dijo volviendo a sonreír.

Me miro y tiene razón. Tengo un pantalón negro y una musculosa.

-Tienes razón…- digo con un tono tan de nene que me doy vergüenza.

-Ve a cambiarte…- dijo al ver que no me movía-…apúrate que tengo que hacerle un favor a una amiga…

-¿Favor?

-Si…

Espero a ver si dice algo más pero como solo sonríe, me vuelvo a mi habitación a cambiarme. Esta chica está mal.

Narra Melisa

La casa parece tan silenciosa habiendo tantas personas, estando Nicholas en esta casa. <Dios, tengo que parar…>

Respiro profundamente y le doy un morisco a mi tostada.

Al cabo de unos minutos Liam y después Yamila entran a la cocina.

-¿Qué te parece si vamos a desayunar afuera?- pregunto Yamila, algo alegre.

Campanas de BodaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora