No puedo ni quiero comprender el hecho de mi estado actual, quiero creerle, saber que todo estará bien...
Que a su lado estaré bien.
Los párpados me pesan y tengo mucho sueño, imágenes de nosotros dos juntos, riendo en nuestros mejores momentos llegan como película a mi mente y, en cuestión de segundos, lo veo aquí, arrodillado a mi lado con lágrimas en sus ojos.
Aun lo puedo sentir, aquí, junto a mi; dice que todo estará bien mientras con sus manos recorre mi cuerpo inerte en el suelo, puedo escuchar como susurra mi nombre entre sollozos.
Quiero preguntarle que es lo que le pasa, pero de mi boca no sale sonido alguno, y de repente, como si un balde con agua fría me cayera encima, me doy cuenta de lo grave de mi situación.
Estoy muriendo...
Quiero decirle que no se preocupe por mi, que siempre lo querré, pero las palabras no salen, se quedan ahogadas en lo profundo de mi garganta.
De repente soy consciente de aquel frío que comienza a extenderse por todo mi cuerpo, llevándose el poco calor que aun conservaba.
Con la poca fuerza aun instalada en mi cuerpo, levanté el brazo y posé la mano sobre su mejilla, antes de irme quiero llevarme un ultimo vistazo de su rostro, le esbozo una pequeña sonrisa y, aunque sabia que no se escucharía, le articule un : "Te amo", antes de desfallecer por completo.
Aun no sé muy bien que fue lo que ocurrió, sin embargo se sintió tan real.
