-Esta noche haré que olvides por completo a ese cabrón.
Empezó a besar mis labios salvajemente y me cargo pegandome a la pared, después bajó a mi cuello y lo beso y chupo durante unos segundos, yo no pude evitar soltar unos pequeños gemidos en su oído, entonces cuando me detuve él levantó mas mi vestido y empezó a rosar mis partes intimas con su erección aun debajo de sus pantalones.
-¿Ves como me pones? -preguntó ronco en mi oído -eres fantástica, te has puesto shorts todo este tiempo en casa, has salido en deportivo a correr por las mañanas y duermes con la maldita puerta abierta -dijo desabrochado su pantalón y bajándolo para poder rosar su erección aun debajo de su bóxer por encima de mis bragas, a lo cual no pude evitar gemir una vez mas, se sentía realmente bien que me lo este restregando de semejante forma -pero hoy no te vas a librar de mi.
-Quiero que me hagas tuya, Erick -rogué y él quito mi vestido mientras yo quitaba su camisa, después quito mi bracier para empezar a masajear y chupar mis pechos sin quitar su mirada de mi cara para observar mis gestos y realmente no pude evitar gemir.
-¿Erick? -él se alejó de mis pechos, yo seguía con mis piernas enrollados en su cintura, se pego completamente a mi sin dejar espacio entre nosotros. Me miraba fijo a los ojos.
-¿Qué pasa? -me pregunto.
-No quiero que... -entonces metió un dedo en mi feminidad tomándome por sorpresa.
-¿No quieres que, cariño? -pregunto con esa pizca de diversión en su voz, realmente se estaba divirtiendo.
-No quiero que... -empezó a mover el dedo dentro de mi, se sentía realmente bien. Tome saliva y continúe hablando -que digas el nombre de alguien más.
-¿Cómo? -preguntó el sacando su dedo.
-No me vuelvas a hacer eso -dije en un hilo de voz.
-Vuelveme a decir lo anterior -ordenó.
-No quiero que digas el nombre de alguien más, es más, no quiero que pienses en nadie más. Solo en mi.
-Por Dios, llevo tanto tiempo deseando tenerte así, ¿Crees que pensaré en algo que no seas tu? -entonces empezó a reír y yo ataque sus labios con lujuria.
-Entonces hazme tuya -ordene y en dos segundos yo me encontraba en 4 en la cama. De inmediato separó mis piernas y pude sentir la cabeza de su amigo en mi feminidad. Al instante solté un pequeño gemido.
-¿Con cuántas personas estuviste antes de tu ex?
-Ninguna, sólo con Alan
-¿Y cuanto le media a ese tal Alan?
-16 creo, ¿Por qué?
-Bueno, pues entonces esto te dolerá un poco -dicho eso metió su polla en mi feminidad dejándome sin aliento.
-Por Dios, tío -dije apenas audible.
-Acostumbrate a llamarme Erick, porque después de hoy vas a llamar por mi nombre a cada hombre con el que estés, y créeme, será extraño que los llames tío.
Dicho esto empezó las embestias, se movía realmente duro y su polla era tan grande que cada vez que la sacaba sentía como faltaba una parte de mi.
-¿A quien estas por olvidar? -me pregunto sin soltar mis caderas y meterla bien duro.
-A Alan, mi ex novio -dije como pude, pero solo conseguí que me nalgueara y después tomará mi cabello como una coleta y la jalara para darme más fuerte y más duro que lo anterior.
-Mier... da -dije muy caliente.
-Gime mi nombre -me ordenó y eso hice.
Él salió de mi y me volteó para volver a entrar en mi, pero esta vez por delante.
Empezó a atacar mi cuello dejando varios chupetones en el.
-Vamos, mami -me dijo seductor -Grita el nombre de papi, grita para papi.
-Mmm... Erick -dije delicadamente al principio, entonces él aceleró un poco las embestias.
-¿Ahora?
-E.. Erick.. -finalmente no tuvo piedad de mi y me dio bien duro
-¿Cómo se llama tu ex novio? -me preguntó.
-A... Al... -pero no pude hablar, me daba bien fuerte en cuanto intentaba decir su nombre.
-¿Cómo se llama tu ex novio?
-A... Ah... Ahh...
-¿Cómo se llama? -dijo dándome tan duro y rápido que estaba punto de venirme.
-Ahh... Erick... Ahh, papi, estoy por venirme, no te detengas -suplique.
-Quiero que me digas como se llama tu ex novio
-A la mierda él, follame así como lo haces
-Eso necesitaba escuchar -dijo sonriente y junto mis piernas para abrazarla y que no las bajará y poderme dar más profundo.
-Mierda, Erick -dije soltando varios gemidos -me voy a venir.
-No lo hagas, espera un poco -entonces dio tan rápido que sentía que no lo lograría.
-Ahhh nena -gimio él.
-¿Listo? -pregunté yo.
-Estoy por venirme
Así que me aleje de él y su rostro lo dijo todo, pero esto no terminaría ahí.
