Único

202 25 7
                                    

Una pequeña sonrisa se extendió por aquellos gruesos labios, y continuo caminando mientras una de sus manos sujetaban fuertemente el ramo de girasoles que irían directamente a su novio. La bonita melodía de los pájaros acompañaban su andar subiendo por aquel monte, sin lugar a dudas su novio era muy complicado respecto a los lugares donde se verían.

Su relación de 3 años a larga distancia lo confirmaba; una risita salió desde su garganta cuando a su mente llego aquel día que Hoseok le mando la dirección de un bosque como el destino para su primer encuentro.
La vez que el menor se dedico a cantarle en una enorme laguna, o cuando cumplieron un año y quedaron de verse en un monumento algo raro de su ciudad.

Recuerdos golpearon su mente, como la vez cuando se puso tontamente celoso del mejor amigo de Hoseok, Yoongi. Pero le resultaba algo irritante que SU novio prefiriera hablar por teléfono con el chico que ve diario a su pareja quien solo podía ver cada 3 meses. Sin embargo no pudo evitar que una risa se le escapará, al fin y al cabo Yoongi tenía pareja y el solo estaba actuando infantilmente.

—Hey, te ves atractivo vistiendo esa camisa blanca y esos jeans rasgados negros; luces completamente guapo, amor.
—Eres un bobo Hobi, tu luces más que guapo con ese suéter amarillo y esos jeans pegados; debo lucir muy aburrido a tu lado ¿no?
—Claro que no, tonto; esos bellos girasoles hacen el contraste perfecto con esa apariencia tan sexy de futuro abogado...

Y un pequeño beso había cerrado sus palabras; se tomaron de la mano y caminaron alrededor de tres horas por las calles aledañas a ese monumento. Seokjin dejo escapar una lagrima ante el recuerdo, su sonrisa jamás desapareció de su rostro, con su mano libre quito de su mejilla aquella lagrima traviesa. Sorbió su nariz y continuo caminando, ya le faltaba poco para llegar a donde su novio se encontraba.

Paró un poco a observar las vistas que el monte le obsequiaba, ya podía ver algo lejos la ciudad de Gwangju, el lugar donde nació su perfecto novio. Estaba a mitad de camino, así que tomando una bocanada de aire continuo su camino mirando de reojo algunos árboles y flores que se cruzaban en su camino.

—¿Por que siempre eres tan lento, cielo?
—Oh, disculpa a tu novio por estar acostumbrado a la ciudad y no a los prados
—Estas completamente perdonado si esos girasoles son para mi
—Claro que son para ti Hobi, todos los girasoles del mundo son para mi pequeño solecito
—¡Yah! Me harás sonrojar, ven para acá y déjame besarte, amor

Otro recuerdo lo aturdió brevemente, fue cuando cumplieron dos años de noviazgo, Seokjin tuvo que viajar desde Seúl hasta Gwangju, camino por los prados verdes que tenia la casa de los abuelos de su pareja; hasta que dio con el menor jugueteando en una pequeña laguna, cuando vio a su novio y su preciosa sonrisa de corazón llego a sus ojos, cada dolor que tuvieron sus pies al día siguiente valió la pena.

Agitó su cabeza cuando sintió un nudo en su garganta formarse, no, él no iba a llorar este día; hoy cumplían tres años y seis meses, debía estar sonriendo todo el tiempo. Si Hoseok le llegaba a ver llorando se preocuparía muchísimo y no disfrutarían su día. Lo que menos quería Seokjin era ver a su precioso novio con ese ceño preocupado, el sabía lo sensible que llegaba a ser su pareja.

—¿Amor? Oh no...Jinnie, no llores mi cielo, todo esta bien
—No...Hobi, no esta bien, nada esta bien ¡No es justo!
—¡Seokjin! Escúchame bien, mi cielo, todo estará perfectamente bien, nosotros sabremos afrontar esta situación.
—¿Co..como? Hobi, no te vayas...
—Jinnie, amor, debo volver a Gwangju, allá es mi hogar, mis estudios, mis padres y hermana. Promete visitarme ¿Si? Ahora abrázame bonito, abrázame muy fuerte...

Y cuando menos se lo espero, sus mejillas ya estaban empapadas de lagrimas. Pequeños espasmos llenaron el cuerpo del mayor mientras su labio era apresado entre sus dientes evitando que soltara cualquier sonido.
Respiro profundamente y paso el dorso de su mano por su rostro para eliminar cualquier rastro de haber llorado, aunque nadie le quitaba el rojizo de sus mejillas y labios.

Tuvo que parar un poco para regular su respiración, llevo una de sus manos a su pecho intentando darse consuelo el solo, el sonido sutil de algunos grillos llego a sus oídos; sonrió recordando las noches de desvelo al teléfono con Hoseok, donde desde ambas lineas se escuchaban los grillos resonar la noche.

Soltó un gran suspiro y camino por el césped, varias personas pasaban a su lado y veía a otras estar sentadas haciendo una especie de picnic. Sus manos comenzaron a sudar y solo atinó a llevar a su suéter azul celeste para secarlas fugazmente. Oh, de nuevo el nudo atacó su garganta y después de tragar saliva camino con paso firme hacia delante. Perfecto, ahí, esperándole.

—Promete visitarme ¿Si? Ahora abrázame bonito, abrázame muy fuerte. Abrázame tan fuerte que tu corazón pueda sentir el mío latiendo a la par del tuyo.
—Es dificil...Hobi, es difícil yo no creo poder...
—Calla, amor, podrás; claro que podrás. Quiero que puedas ¿Si? Mi corazón siempre será completamente tuyo Jinnie, siempre estaremos juntos. Nunca estarás solo.

Simplemente no aguanto, se desplomó; sus rodillas tocaron el césped, los girasoles tirados aún lado suyo y llevando sus manos a su rostro dejo soltar un doloroso gemido acompañado de sus lloriqueos lastimeros.
Algunos adultos que se encontraban alrededor decidieron apartar la mirada tristes; la imagen de un joven llorándole a una lápida no era fácil de ver.

Aún llorando fuertemente, se recostó poco a poco hasta abrazar la fría lapida donde escrito estaba el nombre de su novio; el realmente no quería llorar, pero su pareja, su alma gemela, su todo, había muerto apenas hace cuatro meses. Y no podía evitarlo, quería decirle a Hoseok que el se había graduado al fin como un abogado, que el departamento que ambos ocuparían ya estaba amueblado y esperando a Jin de regreso a Seúl; quería contarle como Yoongi echaba de menos sus ruidosas risas y del como Jimin, su novio, le abrazaba consolándolo, hablarle sobre como Taehyung extrañaba su compañero de lugares extraños; quería decirle de como Namjoon contaba anécdotas en el trabajo que ambos compartían sobre los raps que planeaban hacer, tal vez comentarle como su primo Jungkook de apenas 5 años aún preguntaba por él. Sobretodo, Jin quería decirle a su novio lo mucho que lo amaba y extrañaba; quería decirle que estaba intentando con todas sus fuerzas salir adelante como se lo había prometido.

Cuando hubo su respiración calmado, dejo aquellos bellísimos girasoles y retiro los que ya se estaba secando.
Acaricio la placa donde el nombre de "Jung Hoseok" reposaba escrito en letras negras con una hermosa caligrafía propia de la hermana de su pareja. Dejo varios besos sobre ella, rezó y le contó a Hoseok cada cosa que había pasado aquellos infernales cuatro meses sin él.
Cuando su mente y corazón decidieron que ya era suficiente pudo levantarse y sacudir sus pantalones; beso otro par de veces la placa y con toda la calma del mundo camino hacia la salida.

Una ráfaga de caliente aire choco con su rostro, se detuvo dejándose llevar, cerro sus ojos y giro su rostro hacia arriba. Una calidez enorme invadió su corazón, una de sus manos se posaron sobre la zona donde este se encontraba y una sonrisa se elevo hasta sus ojos.

—Hyung, te amo

—Yo también te amo, Hobi...







Bueno, pues aquí estoy, escribiendo mi primer OneShot 2Seok 💓 espero que haya salido bien; sinceramente no se de donde salió la inspiración, tal vez el escuchar el playlist en Spotify de Shawn Mendes sirvió mucho (págame Shawn, te estoy haciendo promoción alv).
Al principio quise hacer este OS dulce, que todo fuera muy lindo y feliz. Pero creo que me gusto más haberle dado este tiro más triste.
Pues nada, espero que lo disfruten <3

Never be alone //2seokDonde viven las historias. Descúbrelo ahora