El brillo en tu mirada

Playa

POV CALLE

-Que la sueltes imbécil- Lo empujo un chico alto y guapo, con el cabello negro, ojos café claro, labios gruesos y una pequeña barba, tenia expansores en cada oreja y un tatuaje bastante característico de un cubo rubik, lo había visto anteriormente en el ensayo de la mañana pero nunca lo había tenido tan cerca por estar al lado del estúpido de Johann

- Y a ti que te importa Villalobos - Johann le dijo tambaleándose e intentando mantener el equilibrio

- Lo que me tenga que importar, por que no te metes con alguien de tu tamaño- Dijo aquel chico que anteriormente fue pasado por mi escaner.

- Púdrete- Contesto Johann sacándole el dedo medio y apartándose de el. El chico solo negó con la cabeza y volteo conmigo

- Estas bien- Me pregunto mirándome a los ojos lo que me hizo ponerme algo nerviosa

-S-S-SI Perdón- Le dije dándome un pequeño golpe en la frente

- No tienes por que disculparte- Me sentí bastante estúpida por mi anterior comentario-Creo que no nos han presentado de una manera adecuada yo soy Sebastian Villalobos- Me extendió la mano con una amplia sonrisa que hizo que una corriente pasara por todo mi cuerpo

- Y-YO SOY Daniela, Daniela Calle-

POV POCHÉ

Justo cuando estaba apunto de ir a donde Johann vi a alguien que me parecía conocido acercarse hacia mi no lo podía creer. Hace tanto tiempo que no lo veía, había cambiado demasiado se había puesto en forma y estaba bastante guapo.

-POCHE!- Dijo encerrándome en un abrazo con las mismas energías tal y como recordaba. Era Mario Ruiz mi amor imposible de secundaria

-Mario- Dije absorbiendo aquel delicioso olor que desprendía su cuello

-Tanto tiempo sin verte, estas hermosa- Me dijo haciendo me que me sonrojara un poco

-Tu igual- Respondí sin pensarlo algo nerviosa

- Lo tomare como un cumplido- Dijo con una sonrisa en su rostro -¿Vamos a tomar algo?

-Si claro- Respondí caminando hacia la barra recordando el incidente con Daniela, cuando voltee a verla ella ya estaba con Sebastian así que yo me podía ir tranquila a disfrutar de la noche.

POV CALLE

-¿Quieres ir a otro lado?- Me pregunto sebas. Yo simplemente asentí y salimos de aquel lugar. Subimos a su auto, era un hermoso Audi blanco encendió la radio y comenzó a reproducirse la canción "no hay nadie más" y empezamos a cantarla como locos. Manejo alrededor de 20 minutos y llegamos a una pequeña playa. Sebas abrió la cajuela y saco una manta caminamos hasta la orilla de la playa, extendió la manta y nos sentamos

- Tienes preparado esto para todas las conquistas que traes - le dije burlandome un poco de el.

- No, eres la primera chica que viene a este lugar conmigo - Me respondió viéndome directamente a los ojos, eso me puso nerviosa

- Es un lugar muy hermoso- Le respondí mirando la playa

- Me encanta que te guste, este es un lugar muy especial para mi- Me dijo  mientras veía el hermoso paisaje que teníamos enfrente

- Y se puede saber por que- Le respondí mirándolo a los ojos

- Solia venir con mi familia a este lugar, pero cuando mi hermano se enfermo dejamos de frecuentarlo, pero yo vengo cada que puedo. El mar me da tranquilidad y me da paz para reflexionar sobre todo- Me respondió cabizbajo

-Eso es muy dulce, no sabía que tenias hermanos- respondí

- Si tengo dos uno se llama Juan y el otro Gabriel que es mi hermano con cáncer- Me respondió con los ojos cristalinos

- Lo siento mucho, lamento si dije algo que te hiciera sentir mal - Le dije abrazándolo

- No te preocupes, te tenía que contar algún día sobre el- Me respondió limpiándose las lágrimas con la mano -Bueno dejémonos de tristezas, aquí venimos a divertirnos- dijo mientras se paraba y se sacudía un poco el  pantalón, me dio la mano y me pare

- ¿Y que quiere hacer el señor Villalobos?- Le dije con curiosidad

- Hay que bailar- Me respondió con una sonrisa en el rostro.

Saco su celular y puso la primera canción que apareció, casualmente era la misma que habíamos escuchado hace pocas horas. Me tomo de la cintura y mis manos subieron a sus hombros y así fue como el mar, la arena y las estrellas fueron testigos de nuestros pasos de baile.