The Fame [Zayn y ___]

Capítulo 1

Son principios de Julio e inicio de vacaciones escolares. El tiempo se va rápido cuando no vas a la escuela y pierdes la noción del tiempo. Estoy aquí, en el hospital, sentada en mi silla de ruedas, esperando a que la enfermera se desocupe y me atienda. – ¡No puedo creer que he intentado muchas formas de morir y aún sigo aquí!-  comienzo a creer que todo esto tiene una razón, no dejar sola a mi mamá.  De repente, todos mis pensamientos se esfumaron cuando un chico estúpido, que al parecer no me vio,  torpemente tropezó conmigo. Tiene enyesada su pierna derecha –ojalá, le duela y se lastime la otra, por estúpido- pensé, pero luego el chico me volteó a ver tratando de pararse del piso y mi antigua cara de odio hacia él fue modificada por una cara de asombro. -¡No puede ser!, ¡Es Zayn Malik!, ¡Oh por dios!, ¡Zayn Malik acaba de tropezarse conmigo!. ¿es esto una señal?, ¿por esto no debía morir aún?, ¿para cumplir el sueño de toda directioner?, ¡Lo mejor de todo es que él es mi debilidad!-

-         ¿Acaso eres estúpida o qué?, ¡pude haberme fracturado la otra pierna por tu ineptitud!, estar a medio pasillo con tu estúpida silla de ruedas, estorbando, ¿es enserio?

En ese momento, mi estado de ánimo, el cual había sido levantado un poco desde hace unos 6 meses, se vino abajo de nuevo. Me sentí como basura, como la chica marginada que soy, que sólo da problemas  y no sirve para nada.

-         No te sientas mal princesa. Él está de ese humor porque está lastimado y dice que no estará al cien por ciento en los ensayos. –(dijo Harry hincado frente a mi silla de ruedas un poco avergonzado por lo que me dijo Zayn)

-         ¡Es un idiota no le hagas caso! –(dijo Niall)

-         No, él tiene razón. Por mi culpa casi se fractura la otra pierna, yo siempre estoy estorbando en la vida de los demás. Zayn, perdóname por haber hecho que te cayeras. –(dije con la cabeza baja y a punto de llorar)

-         ¡Por supuesto que estorbas! –(me escupió Zayn, sin decir nada más)

-         ¡eres un imbécil! –(dijo Liam. Me siento en este momento peor que como me sentía antes. Me siento estúpida y humillada por una de las personas a las que yo he admirado y he sido capaz de hacer llamar ídolo)

-         ___, ya está listo todo para que entres a tu habitación –(dijo mi mamá al darse cuenta que los chicos que tengo frente a mí a excepción de Louis, son los mismos chicos que tengo en mi pared tapizada de posters)- ¡Wow! Debes estar muy emocionada.

-         ¡No sabes cuento! –(dije, los chicos se miraron entre ellos negando, a excepción de Zayn, quien indiferente mirada a otro lado cruzado de brazos.)

-         ¿Cómo te llamas? –(me dijo Harry)

-         ___ Stewart.

-         ___, no quiero interrumpir, pero ya es hora. Debemos ponerte suero y tenerte en control. –(dijo una enfermera que es amiga de mi mamá desde hace tiempo. Lynn, ella es blanca, de ojos azules pelo lacio y castaño, largo hasta los hombros y labios gruesos.)

-         ¿De qué estás enferma, ___? –(dijo Liam)

-         De la vida. –(dije secamente. Si mi expresión sin vida, de tristeza eterna, mirada perdida en los más deprimentes pensamientos,  no les decía mi estado de ánimo, posiblemente mi última confesión lo haría)

-         La vida es hermosa, sólo es una vez, lucha por lo que quieres, jamás te rindas. –(me dijo Liam de vuelta. Los chicos me miraron no sé si con lástima o les transmití mi depresión latente  en la atmósfera. Luzco como una persona desahuciada. -Posiblemente les doy lástima- A pesar de que me llevé una desilusión de Zayn, aún amo al resto de los chicos.

-         Adiós chicos. Gracias por sus lindas palabras. –(dije mirando a Zayn, quien estaba visiblemente enojado conmigo, con la vida o con quien sabe que)

-         Adiós, ___. –(dijeron el resto de los chicos agitando sus manos, yo hice lo mismo y me llevó al enfermera a lo que ahora es mi cuarto temporal hasta que me recupere. Una vez instalada dentro de él, mi mamá emocionada tratando de hacer que sonría me estuvo hablando sobre mi encuentro con los chicos)

-         ¿Cómo te sientes?, yo diría que afortunada. Muchas chicas estarían celosas de ti. ¿por qué no entras a tu Facebook y lo publicas?

-         Mama… tiene tiempo que ya no entro a él. Tú sabes que no… no tengo amigos.  –(dije casi en un susurro. Hubo unos segundos de silencio, pero mi mamá como siempre tratando de hacerme sentir bien siguió tratando de subir mi ánimo. Admiro que mi mamá nunca se rinda conmigo a pesar de todas las angustias y problemas que la he hecho pasar)

-         ¿por qué no entras a un campamento de verano? Ya van a empezar las inscripciones para uno que estará instalado cerca de aquí.

-         Porque no tengo con quien ir, no tengo amigos, estaré sola, nadie querrá ser mi amigo y porque nunca he ido a esa clase de actividades. –(dije contando cada razón con mis dedos de la mano)

-         Bueno, siempre hay una primera vez para algo, ¿no? Deberías intentarlo.

-         No lo creo.

-         Bueno debes socializar con alguien además de Rose y de mí. Desde que dejaste de ir a la escuela no has hablado con nadie que no seamos nosotras dos.

-         Bueno, no veo ninguna diferencia, en la escuela tampoco hablaba con nadie. Mamá, agradezco que trates de hacer todo esto por mí, pero… no tengo futuro.

-         No hables así, sé que lo que sucedió te afectó mucho, a mí igual, jamás lo olvidaremos porque nosotros los amábamos. Pero debemos salir adelante, dudo mucho que ellos quisieran que nosotras estuviéramos así. Ellos siempre nos quisieron ver felices y deberíamos hacerlo por ellos.

-         Tú tal vez ya lo superaste porque no tuviste nada que ver en ello. Conmigo es todo lo contrario, yo provoqué todo esto y ahora ellos están muertos por mi culpa.

Es el séptimo día que llevo internada en el hospital, la enfermera, Lynn, me puso unos medicamentos directo en las venas nuevamente, ha sido así desde que llegué al hospital. Se siente un tanto doloroso, pero nada comparado con la tristeza de mi infeliz vida. Según Lynn, he estado mejorando y si sigo así mañana mismo salgo, al parecer ingerir diferentes medicamentos en exceso no fue lo suficientemente fuerte para matarme. Bueno en fin, debo tachar intoxicación por exceso de medicamentos de mi lista de intentos fallidos.

A la mañana siguiente, mi mamá me ayudó a cambiarme de ropa, me movió a mi silla de ruedas hasta la sala de recepción de las personas internadas para esperar a que el papeleo esté listo. En eso un chico blanco, de cabello café un poco chino y para ser sincera con hermosos ojos color marrón y una enorme sonrisa se acercó con su silla de ruedas y me habló.