Una vez ella me mostró su cuaderno
y me dejó que lo leyera.
Esto no está narrado cronologicamente
solo son los recuerdos
que pasan por mi mente
sin orden alguno,
como su cuaderno
Su cuaderno:
esa cosa marrón que cargaba a todas partes
tenía olor a cefé,
y a lágrimas,
y quizás a algo de sangre,
pero preferí no preguntar.
Allí había sentimientos y experiencias,
pero sobre todo
había poesía
pero de la buena,
no como estos tristes versos rotos.
Sentimientos oscuros y deseos terrorificos,
encerrados bajo la tinta negra de la lapicera.
Sellados con algunos garabatos que hacía en las esquinas.
Ese era su cuaderno,
Esa era su vida...
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Ella...
RandomElla no espera que la entiendas, porque eso es imposible ni siquiera ella lo hace. Solo no la juzgues por lo que ha hecho, a veces ni siquiera ella sabe el por qué de ello. *Obra registrada en SafeCreative bajo el código: 1409041896174.
