𝐄𝐥 𝐜𝐨𝐦𝐢𝐞𝐧𝐳𝐨 𝐝𝐞 𝐭𝐨𝐝𝐨.
𝑈𝑛 𝑒𝑛𝑐𝑢𝑒𝑛𝑡𝑟𝑜 𝑝𝑒𝑐𝑢𝑙𝑖𝑎𝑟 𝑒𝑛𝑙𝑎𝑧𝑜 𝑠𝑢𝑠 𝑑𝑒𝑠𝑡𝑖𝑛𝑜𝑠.
La pequeña campana que colgaba de la puerta de aquel peculiar refugio tintineo, indicado que alguien había entrado.
– Buenos días, Aizawa-chan — pronunció una suave voz que, para él peligro, le resultaba familiar.
Ante esto, dirigió su mirada cansada hacia la puerta del refugio y diviso una cabellera [C/D/C] que se acercaba a él, reconocimiento está misma casi al instante.
Cuando la fémina y el hombre estuvieron cara a cara, está le dedicó una pequeña sonrisa como saludo.
– ¿A qué has venido esta vez? —preguntó sin mayor demora el mayor.
– Yo también estoy bien, Aizawa. Gracias por preguntar — [T/N] respondió con un sutil tono de burla que no paso desapercibido para el azabache.
– ¿A qué has venido? — volvió a preguntar sin tomar en cuenta lo antes dicho por la fémina.
– No haz cambiado en nada, sigues siéndo el mismo gruñón de siempre — le recriminó la [C/D/C], ganadose una mirada de indiferencia por parte del hombre.
[T/N] suspiró al darse cuenta que, como siempre, Aizawa no estaba dispuesto a hablar más.
La fémina abrió su boca para hablar pero, cuando estaba a punto de decirle al pelinegro el motivo de su visita, unos energéticos aleteos la interrumpieron.
– ¡Hello, my dear lady!.
Fue solo cuestión de segundos para que una alegre y escandalosa cacatúa se posara en su hombro.
– ¡Hizashi!– dirigió su mirada [C/D/O] hacia donde yacía la rubia ave.
– ¡También conocido como "your favorite person"! — respondió con alegría, ganándose algunas caricias en su cabeza por parte de la fémina.