CAPÍTULO 5: Tu misterioso alguien.

401 51 14
                                    


3:55 a.m.

Tenía los ojos completamente abiertos, mirando el techo oscuro con la respiración errática. Las manos le temblaban y las piernas hacía mucho tiempo que dejo de sentirlas. Sabía que debía tranquilizarse, debía comportarse como un hombre que podía soportar todas las tentaciones que le ponía la vida porque lo odiaba demasiado. Giro su cabeza para ver a su acompañante y casi se le caían los calzones de la impresión al ver al maldito hombre ahí a pocos centímetros de él, durmiendo plácidamente.

Siempre supo y reconoció que tenía el rostro perfecto por cualquier ángulo que le vieras, aun con ojeras que bien podrían competir con Seung Ri, él era perfecto. Pero nadie podía ver que tan maravillosamente hermoso se veía al dormir, excepto él, claro. Su piel parecía como nieve, tan blanca y seguramente suave, sus pestañas largas y espesas decoraban sus ojos, su cabello negro cayendo despreocupadamente por su frente. Resistió el impulso de pararse por su celular y tomarle una foto. No, Ji Yong, tienes que soportar.

-Joder, pero es que es tan difícil.-susurro. Maldita hora que se le ocurría venir a dormir con el mayor sabiendo que su corazón no podía soportar tanto. Bueno hasta estaba sudando de los nervios.

Carraspeo a la vez que el cuerpo de Seung se movía un poco para quedar boca arriba, su camisa del pijama se enrollo dejando a la vista un poco de su pecho, cosa que no pasó desapercibida por aquellos ojos marrones. Ji Yong se sonrojo al ver "un poco más" de lo que estaba acostumbrado. Alzó un poco la mirada para ver más pero si no se movía no iba a ver ni madres.

-Okey, me paró pero...nada más voy a ver ¿sí? Nada más voy a ver, nadie se muere por ver ¿o sí? Además si no se entera nada va a pasar.-se movió un poco con todo el miedo posible de despertar al chico con algunos de sus movimientos.-Joder, joder, joder, por favor, diosito que duerma como oso, por favor.-cerrando los ojos se levantó, apoyado en sus codos, y abrió solo un ojo para ver lo bella, bella que era la vida. Una pequeña sonrisa se dibujó en sus labios cereza y extendió su mano para tocar aquella parte de piel que se le brindaba inconscientemente-Ah, eres tan bello, Seung.

Sonriendo, se levantó con mucho cuidado para ir por su celular y tomarle una foto...bueno, muchas fotos porque esas vistas no se daban muy a menudo en su vida. Se le quedo viendo cuando quedo satisfecho de su trabajo y algo en la cabeza le paso... ¿Qué pasaría si Seung se enteraba que era gay? Seung Hyun no era malo con ellos, era un idiota que le echaba tierra para que no se besaran, como un niño pequeño pero aun recordaba el grito que dio a los cielos cuando se enteró de la relación del maknae y Sol. Había sido tan fuerte que los vecinos pensaron que lo estaban matando.

-¿Si lo supieras...me dejarías dormir a tu lado tan simple como hoy?-pregunto, mirándolo ahora con preocupación. No quería que Seung lo rechazara, no lo soportaría pero eso no era lo peor, era que se enterara que el hombre, el único hombre que amaba era él.- ¿Qué voy a hacer?

7:00 a.m.

-¡Eso fue lo más divertido!

-Shhh...vas a despertarlos, Ri.-le dijo Bae, cerrando la puerta tras de sí.

-¡Ustedes!-la voz del líder se escuchó por toda la habitación-¡¿Cómo se atrevieron a dejarnos solos, eh?!

-Hola, hyung, buenos días. Estamos bien, gracias.

-¡No me vengas con eso, maknae tonto!

-Ya, no digas que no fue una gran idea.

-Sí, Ji, fue una buena idea para que estuvieras junto a Seung Hyun ¿no?

¡NO SOY GAY!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora