El pequeño rubio se tiró al suelo y empezó a respirar con algo de dificultad, en realidad todos los presentes en aquel estudio de baile lo hacían. Y es que la coreografía sí estaba un poco difícil, pero con esfuerzo y pasión se lograría.
«¡Jiminie!»
Hasta ese punto, Jimin tenía los ojos cerrados, sin embargo pudo reconocer la voz inconfundible de su alegre amigo pelirrojo. Aquel que a comparación de los demás, no mostraba ni signos de estar cansado.
«¿Hmm?»
«Adivina qué...»
«No tengo ganas de adivinar Hobi, estoy muy cansado, ¿tú no?»
Hoseok negó, aunque Jimin no pudiera verlo. «Ni un poquito».
«Y bueno, ¿cuál es la sorpresa?»
«Ah, ¡claro!...». Hoseok se quedó callado por unos segundos y eso a Jimin le pareció extraño, abrió los ojos poco a poco, y al estar completamente abiertos se encontró con un papel muy cerca a su cara.
Tomó la muñeca de su amigo para alejarlo un poco de su rostro y así ver mejor. Al hacerlo, notó que aquel papel blanco, se trataba de una cita para masajes en un lugar no muy lejos de su hogar.
«Para mi mochi» Hoseok le ofreció la cita con una gran sonrisa, esperando a ser aceptado. El rubio tomó el papel para leerlo de inmediato.
«Noté que estás muy cansado últimamente, así que quería que te relajaras un poco, y qué mejor manera de relajarse que con un buen masaje» El pelirrojo volvió a sonreír grande y sólo logró conmover a su amigo.
«Gracias Hobi, no tenías por-...»
Hoseok interrumpió rápidamente a su amigo.
«Yah, no importa, quería hacerlo, y espero que vayas Jimin, sino, jamás te volveré a dar algo, ¿de acuerdo?»
Jimin asintió efusivamente y se lanzó a los brazos de su amigo.
«Jimin...»
«Hmm»
«Te quiero, pero estás sudado»
Hoseok puso cara de disgusto, Jimin lo vio y empezó a reírse por lo gracioso que se veía, era un idiota.
Pero lo quería.
Pero era un idiota.
......
«Ah... malditos todos, maldito mi jefe, maldito mi cliente, maldita la gente que quiere masajes, malditas manos, maldito presidente».
El pálido pelinegro, claramente molesto acomodaba unas cuantas toallas de mala gana, odiaba su trabajo. Tocar cuerpos de desconocidos no le gustaba en los absoluto, sin embargo se le daba muy bien en eso. Él sólo estaba consiguiendo dinero extra, pero cuando termine de estudiar y se consiga un trabajo mejor, juró mandar a la mierda a su jefe y renunciar. Sí eso haría.
Pero por ahora, solo le quedaba quejarse.
«-... Es que la vida es injusta, naces, creces un poco, estudias, estudias, estudias; universidad, estudias; trabajo, te mueres; fin».
Yoongi quería ser un gran compositor...
«-... Maldita sociedad, la gente debería seguir sus sueños. Odio todo, maldición»
«Yoongi...»
«Qué quieres Tae»—Yoongi habló soltando un pequeño suspiro—
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«Massages and sex» -Yoonmin-
Fanfiction«-Jimin, estás muy estresado...» «Noté que estás muy cansado últimamente, así que quería que te relajaras un poco, y qué mejor manera de relajarse que con un buen masaje» El pelirrojo volvió a sonreír grande y sólo logró conmover a su amigo. Dónde Y...
