Capitulo 1

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Me desperté porque los rayos de sol iluminaban mi cara, maldita sea, anoche olvidamos de cerrar las cortinas. Tenía mi cabeza apoyada sobre el pecho desnudo de Chad, mi oreja estaba a la altura de su corazón, escuchaba sus latidos y sentía su respiración, como subía y bajaba. Parecía una coreografía, movimientos profundos, tranquilos, inhalar y exhalar, movimientos simples, que salen por si solos, dos acciones que hacemos todos, simplemente inhalar y exhalar, pero de la forma en que él lo hacía parecía perfecto. Su pecho estaba caliente, la temperatura perfecta como para hacerme estar en las nubes, con su mano me abrazaba por la espalda, teníamos los pies entrelazados. A su lado, me sentía única, frágil como un fino plato de porcelana, me sentía cuidada, protegida, a su lado no tenía que temer a nada, sabía perfectamente que él me cuidaría en todo momento.

Los rayos del sol me dejaban ver su cara perfectamente, sus ojos relajados, su cabello rubio, su piel dorada. Una cálida mañana de verano comenzaba. Éramos dos jóvenes, adolescentes simplemente, pero lo suficientemente maduros como para entender sobre el amor. Yo lo amo y él a mi. Una pareja envidiable desde el punto en que lo veas, dos chicos inteligentes, con muchos amigos, los mejores amigos que se pueden pedir, familias hermosas, sin problemas en la escuela, queridos por profesores y directivos, con ofertas para universidad, a punto de cursar el último año de secundaria, a tres semanas de volver a la escuela. ¿Pero qué importa? Si con Chad hacíamos que nuestros días en la escuela sean únicos.

Somos novios desde los 15 años, ahora tenemos 19 años, 4 años de perfecta relación, ¿Celos? Claro, en qué pareja no hay celos. ¿Peleas? Por supuesto, una pareja sin peleas, no es pareja. ¿Amor? Nuestra pareja era el perfecto ejemplo de amor.

Disfrutamos uno del otro como si hubiéramos nacido para eso, nuestras vidas simplemente estaban destinadas a que nos encontráramos y poder vivir felices. Junto a él vivía en un cuento de hadas. Este cuento no era la excepción a los otros, hubo desafíos, brujas que nos quisieran separar, los amigos fieles que jamás dejan a los protagonistas, la princesa que no quiere besar al sapo, pero después descubre que haberlo besado fue la mejor decisión de su vida, porque el sapo se convirtió en el príncipe que toda princesa desea.

Quién lo diría, que Chad, mi mejor amigo desde jardín se enamoraría de mí, y yo tontamente, lo veía como un mejor amigo. Pero luego me di cuenta que ya no era así y darle una oportunidad fue mi mejor decisión.

Chad simplemente es mi todo, mi mejor amigo, mi cómplice, mis sonrisas, mi pañuelo en los peores momentos, es mi amor, mi compañero en esta vida, sin él no tiene sentido mi vida, sin él nada es lo mismo.

True love.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora