MinGyu se muerde las uñas paseando de un lado a otro en el pasillo de la sala de espera. Ya han pasado casi dos horas y nadie ha salido de esa puerta a decirle que todo está perfecto, a calmar sus nervios de fiera enjaulada y ponerle fin a su sufrimiento.
Acaba de llamarle su madre esperando respuesta, MinHee está igual de ansiosa que él y definitivamente SoonYoung no ayuda ahí sentado cómo si no estuviera MinGyu a punto de ser padre.
—Calma, están bien. —asegura, con un termo de café entre las manos. El frío decembrino le cala hasta los huesos, más aún a las seis de la mañana. —Están en manos del mejor doctor del mundo.
MinGyu gira sobre sus talones. —Es tu esposo.
—Precisamente.
El reloj sigue marcando un tic, tac, insistente que le pone los nervios de punta a MinGyu. Un paso delante del otro hasta llegar al final del pasillo y luego girar en sus talones para volver a emprender camino hacia adelante.
—¿Que hora es? — insiste, con el pulgar entre los dientes.
SoonYoung desde el sofá, se toma el tiempo para decirle que solamente ha pasado un minuto desde que preguntó la hora. Aparentemente ha olvidado que se desmayó dos veces del estrés en la sala de espera cuando nacieron sus hijos, porque está demasiado calmado a pesar del acontecimiento y de que su esposo lo despertara a las cuatro de la mañana para correr al hospital a recibir al hijo de su mejor amigo.
En medio de lo que promete ser una crisis nerviosa, la salvación llega en forma de los hermanos Lee, quienes entran corriendo a la sala de espera, vestidos totalmente de ropas médicas. JiHoon se quita el cubre bocas apenas entran y SiYeon le lanza a MinGyu un cambio de ropa para que pueda entrar a la sala de parto.
—¡Está naciendo! — exclama su esposo, vestido de verde agua sobre su ropa. —¡Está aquí, MinGyu!
A velocidad de la luz (o de un padre emocionado) MinGyu se coloca la ropa para entrar, guiado por una sobre exaltada SiYeon que parece todo en ese momento menos enfermera responsable y seria.
—¡Felicidades! — le grita SoonYoung antes de que atraviese la puerta, pero el matrimonio se detiene y corren de regreso para abrazarlo. —¡Eh, eh, que me matan!
—Gracias... — suspiran, uno a cada lado de su amigo después de casi caer al suelo.
Y sin más, corren rumbo a la sala, donde su bebé espera por ellos.
....
Efectivamente Kwon SeokMin era el mejor médico del mundo, porque tan solo lo que tardaron en ir a buscar a MinGyu, recibió sano y salvo a un precioso bebé de dos kilos y trescientos gramos.
El matrimonio cruza por la puerta al mismo tiempo, justamente en el segundo donde el recién nacido llora. El peso del mundo parece desaparecer de sus hombros al verlo, escucharlo. Se abrazan tan fuerte, mientras ninguno sabe quien de los dos llora más.
SiYeon, a lado de la hermosa mujer que hizo realidad su sueño, les llama con la mano. KyungWon está recostada, mientras su enfermera le acaricia el cabello y sujeta su mano.
—Lo hiciste muy bien, mi familia está eternamente agradecida contigo KyungWon, muchas gracias, muchas gracias... — repite SiYeon, entre lágrimas y sonrisas.
KyungWon le sonríe de vuelta. —No agradezcan... Ha sido un honor...
—Señorita Kang... — la llama JiHoon, sujetando la mano de su esposo. —Muchas gracias, muchas muchas gracias... — entre el llanto, se inca a su lado para tomar su mano entre las suyas.
👶
—¿No es precioso?
MinGyu asiente, acariciando el cabello de su esposo sobre su hombro. JiHoon suelta todavía suspiros cortados, después de haber llorado tanto tiempo. Ambos observan por el cristal a su bebé, recostado y envuelto de una manta color verde menta, con un gorrito a juego, durmiendo en calma.
—Somos padres... — susurra MinGyu, abrazando por el costado a JiHoon. —Somos padres, JiHoon...
Su madre va en camino junto a MinHee para conocer a su hermanito y en ese momento de íntima paz, se permiten abrazarse el uno al otro, con el futuro por delante y su familia completa.
—¿Vas a llamarlo como tu padre? — sabiendo lo delicado del tema, MinGyu acaricia la espalda del menor.
JiHoon traga saliva, recordando al hombre que tanto lo amó, criando a él y a su hermana solo y viudo. Su padre : a quien tantas veces ha visitado solo, con su hermana, con su esposo para decirle que está bien, que es casado, que SiYeon tuvo una hermosa niña y que él ahora es padre... Pero no lo recordaba.
JiHoon sigue asistiendo al asilo cada domingo sin falta, a veces solo, otras veces lo acompaña su hija, otras su esposo, su hermana... Va a visitar a su padre y le cuenta como va la vida, recibiendo gustoso respuestas y recuerdos en momentos de lucidez que ya cada vez son más escasos. Todavía pregunta por su esposa y JiHoon nunca ha sabido que responder sobre su madre a ese hombre roto que tanto ama.
—Sí, quiero que lleve su nombre...
MinGyu le besa la frente. —Lo llevará. Su nombre será Kim MinSo.
—MinGyu... — entre sus brazos, JiHoon recarga la mejilla en el pecho de su esposo. —Gracias...
—¿Por qué?
JiHoon suspira, entrelazando sus dedos. —Por darme una familia.
“¿Qué es familia?" se le preguntó una vez en un libro de escuela a la pequeña Kim MinHee de entonces tres años.
“Hay muchas familias. Familias chiquitas, familias con perro, familias de mamis y papis, familias sin bebés y familias de Papá y Minnie."
“Familias de hermanos, familias de amigos, familias de esposos y familias de Papá, Minnie, Bebé Min y Papi.” escribió sobre su respuesta a los ocho años, cuando su padre le entregó en brazos a su hermano menor, en casa, con todos sus tíos y primos incluyendo a Chan y su hermana Sunny, a los tíos Kwon y sus gemelos, Mamá Yeri y Omma Yuri, los hijos de tía Yeon y el gato de la abuela, por supuesto, junto a sus dos papis.
¿Qué es familia?
Familia es hogar.
FIN
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Un Novio Para Papá ─GyuZi
Fanfiction2.- ¿Qué es familia? "Hay muchas familias. Familias chiquitas, familias con perro, familias de mamis y papis, familias sin bebés y familias de Papá y Minnie." Cuando el ya de por sí desastroso padre soltero Kim MinGyu falta a la junta de su pequeña...