La carta.

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la vida como se conoce se ha llenado de estéreo tipos de belleza, el mundo se ha distorsionado y se comenzó a discriminar a las personas en como se visten, donde viven, etc. Un día un chico se dio cuenta que se sentía muy atraído por una compañera de clases, esta era atractiva, deportista y buena en los estudios, y el era tan tímido, poco atractivo y bastante regular, un estudiante promedio cualquiera.

viendo la diferencia social que los separaba en el mundo actual solo se limitaba a mirarla desde lejos, la seguía y de cierta forma la cuidaba, para muchos seria acoso pero el solo quería verla, se sentía bien mientras podía apreciarla así fuera desde lejos, un día le comento a su abuelo sobre esta chica y el abuelo con su experiencia le contó un poco como eran las cosas antes y le aconsejo que intentara algo.

el chico luego de haber escuchado lo que le dijo su abuelo, paso toda una noche pensando es que podía hacer, y nada llegaba a su mente, no sabia si el hacer algo podría afectar su día a día, o peor alejarla para siempre y se acobardo, bastante angustiado habla con su madre y le comenta un poco sobre el tema, la madre al notar su preocupación le dice:

-Es mejor que intentes y no lo logres a que nunca lo intentes y te arrepientas de por vida

ya con eso en mente se dispuso a hacer algo que en la actualidad no se veía mucho o era bastante anticuado por así decirlo, pero aun así lo hizo. Escribió una carta exponiendo sus sentimientos, en la carta decía todo lo que había hecho, por cuanto tiempo y porque no se habia acercado antes. el texto era así:

"hola, quizás ya sepas quien soy o quizás no, soy tu compañero de clases que se sienta tres puestos detrás de ti, el que siempre se queda mirándote, soy bastante tímido por eso nunca me he acercado a ti, muchas veces te seguir al salir del colegio solo para poder verte mas tiempo, lo hice muchas veces y puede que te de miedo, ya que suena como si fuera un acosador, pero no es así, solo soy un admirador aprecia tu parecencia, quiero confesar que me gustas, se que no soy nada atractivo, pero necesitaba decirlo, o al menos hacer algo para que lo supieras, no tienes porque guardar esta carta, si quieres puedes botarla, romperla o quemarla, solo es algo que debía hacer, solo son mis sentimientos hacia ti... solo quise intentarlo. no espero una respuesta, pero por favor no me odies"

ya terminada la carta tenia que idear un plan para entregarla, siendo muy tímido no sabia que hacer así que pensó en meterla en su cuaderno mientras ella no se diera cuenta, llego el día de entrega, comenzó a estar muy atento para tener la oportunidad perfecta, justo cuando sonó el timbre de la hora del almuerzo ella se levanto y dejo totalmente descuidadas sus cosas, el se levanto camino rápidamente,coloco la carta sobre el cuaderno y salio del salón para no levantar sospechas.

al salir del salón sintió como su corazón casi salia de su pecho y por su mente solo pasa una palabra "lo hice" camino para calmarse, fue a un bebedero sacio su sed y procedió a volver a su respectivo salón, los nervios eran tantos que olvido comer justo al llegar al salón había un chico bastante atractivo, de rodillas con una pancarta y un ramo de rosas pidiendo a alguien que fuera su novia, no notaba a quien se le estaba declarando, la multitud no dejaba ver, pero llego un profesor e interrumpió, cuando mire bien era la chica de que siempre estuve enamorado antes que el profesor entrara ella lo rechazo diciendo que no era su tipo y que mejor no molestara, el chico solo agacho su mirada y se retiro.

al mirar esta situación el chico solo pensó que si rechazaba a alguien tan atractivo, e seguro seria rechazado también, resignado y derrotado antes de saber el resultado final al sonar el timbre para retirarse salio casi corriendo para no saber su veredicto final, pero la chica lo detuvo, le dijo que lo esperara en la salida de el colegio, en impresionado no dijo nada y termino de salir caminando.

llego a la salida y se detuvo allí a esperar, no sabia si era para dejarlo en ridículo o decirle que se alejara... pasaron veinte minutos y nada que aparecía la chica, ya casi todos lo estudiantes se habían retirado, una hora, no se veía a nadie en el colegio y el aun allí, pensó que esa era la respuesta de la chica y cuando estaba a punto de irse recordó lo que su madre le dijo y se armo de valor y dijo para si mismo "esperare un poco mas" una hora y treinta minutos, ya era de noche y todo su valor se había esfumado, miro una vez mas al colegio y al darle la espalda con la mirada baja escucho unas palabras de una voz femenina desde la calle:

La cartaWhere stories live. Discover now