Entre a mi casa y corri hacia las escaleras dirigiendome a mi cuarto, sentia mis mejillas arder y por las cuencas de mis ojos salian cada vez más y más lagrimas, puto Mick.
Acabamos de llegar del cementerio y cada minuto que pasa siento punzadas de dolor en mi pecho por lo que hizo el obeso de mi padrastro, orino en la tumba de mi preciosa abuela.
Me dío igual ver o no su miseria, lo que queria era detenerlo, no quería que le hiciera eso a mi ángel. Pero no pude.
Me hizo a un lado de un manotazo, haciendo que callera hacia el pizo de senton, senti las humedas lagrimas caer por mis mejillas y se me escapo un sollozo, Mierda.
Mick dejo de orinar, se abrocho los pantalones, dio una media vuelta y me lanzo una mirada llena de odio.
- ¿Es qué no te he dicho qué las zorras no lloran? Solo sirven para parir.
- ¿Por qué haces esto? - Dije con la voz entrecortada - ¿Por qué a mi abuela? ¡¿ELLA QUÉ TE HIZO PARA QUE HAGAS ESO EN SU TUMBA?! ERES UN ESTUPIDO, MICHEL.
Posteriormente me pego justo entre las costillas.
Ahora estoy tumbada en mi cama, tratando de borrar esas horribles imagenes sucesidad anteriormente, pero no podía, amaba tanto a mi abuela como para que no me doliera que mi padrastro haya hecho eso.
Así que tome una desición. Me levante de la cama y me dirigí hacia mi baño, justo detras del espejo, a un lado de las medicinas, encontre mi navaja. Solo queria parar el dolor. No me importaban las consecuencias.
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Hace mucho que no subia, gracias a las personas que me han pedido que la sigua, las amo :).
Si gustan en los comentarios dejenme preguntas y se las contestare con todo gusto.
Gabriela xx.
