El Retrato ×||Imagina Con Kanato Sakamaki||×

Capituló 9 ׿Yui?×

Narra Laito

Estaba pensando el como podría llevarme aquella concubina a mi habitación, cuando de repente escuchó los gritos de ella, y al parecer también la voz era de ¿Kanato?, que hacia Kanato con ella, solo bajo hacia la planta baja y veo a _______, totalmente sonrojada mientras "tapa" sus pechos, luego mi mirada pasa hacia Kanato... Al parecer tenia sus arranques de bipolaridad, ya que _______ tenia una expresión de miedo, para luego que Kanato se empezara a reír y caer al suelo por la misma risa, solo agite mi cabeza en desaprobación, me di la media vuelta.

¡HEY! -dijo Kanato desde el suelo- Los pechos de _______ al parecer son cercanos a los de tus gustos -decía Kanato carcajeándose en el suelo-

Solo voltee hacia _______, ella también volteo hacia mi, estaba totalmente sonrojada, pero como siempre, mi lado pervertido bajo la mirada hacia sus pechos, como dijo Kanato, son los de mis gustos, pero tenia que irme o desviar la mirada, si quería despertar a alguien, solo me fui, y seguí con mi maravilloso plan.

Narra Reiji

Me llego una carta, era la llegada de una novia de sacrificio, se lo cuento a los demás chicos, pero ellos como siempre, no me prestan atención, así que.

Es alimento -dije algo frustrado-

Como era de esperarse, en ese momento todos me prestaron atención, sigo hablando, cuando veo a _______, asomándose por la abertura de la puerta.

Espiar es de mala educación señorita Kami -dije naturalmente-

Ella solo se sonrojo por la pena y haciendo una leve reverencia.

Lo-lo lamento Reiji, no volverá a a pasar -dijo para marcharse toda apenada-

Seguí explicando a los chicos, termine dando los mejores detalles antes mencionados, la nueva novia de sacrificio era Yui Komori.

No voy a poner TODO el anime (primera temporada) la mayoría para no decir que ya tod@s sabemos que paso (bueno nunca se sabe) empezaré la narración de donde Kanato lleva a Yui con sus "muñecas", además tengo flojera xd

Narra ________

Habían pasado algunas semanas hasta que llego su novia de sacrificio, si no mal recuerdo se llama Yui, pero por lo mismo que es una novia de sacrifico tenia prohibido que ella me lograra ver, así que solo llegaba a salir cuando ella esta dormida o no estaban, un día al pensar que no estaban empecé a caminar por toda la mansión, pero al parecer vi una puerta entreabierta que salia una luz suave, me asome pensando que alguien dejo prendida su luz, al asomar, pero me encuentro.
A Kanato mordiendo el cuello de una chica rubia, la chica hacia fuerza para separarse, pero esos intentos fueron en vano, primero se desmayo pero poco a poco su piel se hacia mas blanca, hasta que Kanato la deja caer al suelo limpiando su boca que marcaban un hilo de sangre, la chica al parecer ya estaba muerta, ya que Kanato le empezó a dar golpes de su estomago y esta no reaccionaba, Kanato empezó acercarse a la salida me escondí, al ver que Kanato se alejaba me metí en la habitación.
Esa chica al tener sus ojos abiertos pude ver que deseaba su fin, pero su expresión era de terror, solo me limite a verla, cuando escuchó la voz de Kanato cada vez mas cerca, me escondí detrás de aquellas muñecas de cera. Kanato traía... ¿Cera derretida?, empieza a quitarle el cabello desde la raíz, dejando a la pobre chica calva, para después ver que Kanato la empieza a desvestir y le hecha la cera derretida, obviamente hirviendo, al ver que la baño en cera, le quita la cera de sus ojos y la pone en pie, poniéndole un hermoso vestido de novia, volvió a salir de la habitación con el cabello de la chica.
Al ver que se alejo salí de mi escondite, al ver aquellos ojos rodeados de cera, solo me daban ganas de vomitar, no decidí a que Kanato decidiera que yo fuera la siguiente, salí rápido de la habitación, solo tenia el estomago echo un asco, empecé a vagar por el jardín, para quitar aquellas escenas de mi mente, a pesar de que eramos la misma "raza", a mi me provocaba asco que una persona muerta fuera inmortal, bueno de alguna manera física. Estaba intentando sacar eso de mi mente hasta que escuchó...