Saint Omegaverse: ¡Un bebé en camino! (Hyoga X Shun)

Primer día...

Mi sueño se interrumpió cuando algo en mi garganta estaba amenazando en salir de mis labios.

Quité bruscamente el brazo de Hyoga que me abrazaba causando su despertar.

Corrí directamente al baño de la habitación y me arrodillé ante el inodoro.

Escuche como el ruso llamaba a mi nombre; no tardó en divida mi paradero y corrió hacia mi.

— ¡Shun! — Sostuvo mi cabello.

— Lo siento, debí cenar de más.

— Pero, no comiste nada en la cena.

— ¿Ah... No? — Volví a sacar todo mi daño.

Hyoga bajó un momento y al volver traía consigo té para calmarme.

Sentí que no podía sacar más de mi estómago y caí rendido en los brazos del cisne.

De repente recordé lo que ocurrió hace unas semanas, cuando Hyoga se corrió dentro de mi.
Me incorporé de golpe y voltee mi mirada hacia el rubio.

— ¿Crees que lo que sucedió aquella vez...?

Hyoga entendió inmediatamente lo que quise darle a entender.

Me miró sorprendido
— Tenemos que asegurarnos. Pero por ahora... Es mejor intentar dormir. Ven. — Hyoga tomó la mano de Shun y lo dirigió a la cama.

Despertamos más tarde y con sigilo salimos de la mansión hasta un doctor.
Me hicieron pruebas de sangre; nos dijeron que los resultados estarían listos en la tarde.

Hyoga sugirió ir al centro comercial mientras esperábamos y yo solo pude asentir.

Estaba muy nervioso.
Mis manos temblaban mientras jugaba con mis dedos.

Hyoga me abrazo rodeando mis hombros y seguimos caminando.
Su cercanía me hacia sentir mejor.
Pero no podía sacarme esa duda de la cabeza... Yo... ¿Estaré embarazado?

Ya que mi miraba estaba en el piso; no me di cuenta cuando entramos a un café.

— ¿Eh? — Miraba a todos lados intentando identificar el lugar.

Hyoga me sentó en una mesa y después el tomó asiento frente a mi.

— Calmate un poco. — Me dijo mientras miraba la carta. — Debes tener hambre.

En realidad no tenia nada de apetito, sentía mi estómago lleno.
Sin embargo al abrir la carta mis ojos se iluminaron al ver el menú.

Mi mirada se fijó directamente al pastel de chocolate que ofrecían en el lugar.

El mesero se acercó y rápidamente le señalé mi objetivo.
Mientras Hyoga sólo pidió un café frío.

Me sentía avergonzado que Hyoga me viera de esa manera por un antojo.
Pero a él no le molestas en absoluto.
Sólo me miraba fijamente con una pequeña sonrisa.

Las ordenes no tardaron en llegar y la vergüenza desapareció en segundos al igual que la mitad de esa rebanada de pastel.

Miré de reojo al cisne, tomé un pedazo de mi postre y se lo acerqué a la boca.

Quitó sus labios del sorbete y se dirigió a degustar lo que le ofrecía.

Sus ojos se fijaron en mi nuevamente.
Esa imagen de él mordiendo el cubierto... Era sumamente sensual y me sonroje de inmediato.

Soltó el tenedor lentamente de su boca dejandome con una vista extasiada.

Acerque el tenedor hacía mi y seguí comiendo, dando a mi novio igualmente por tiempos.

El tiempo se nos hizo muy rápido entre platicas y ya era hora de recoger los resultados.

Llegamos nuevamente mientras mi corazón latía alocadamente.
Mientras que Hyoga se mantenía sereno y serio como siempre.

No s entregaron el sobre y decidimos guardarlo hasta que llegáramos a casa.

En el camino; observábamos aquel departamento que estábamos planeando adquirir y sólo nos sonreímos al verlo.

Entramos a la habitación de Hyoga y cerramos la puerta con llave.

Me senté al borde de la cama con este en manos.
Hyoga se arrodilló a la altura de mis piernas y tomó mis manos.

Suspire y comencé a abrirlo.

Empecé a leer en voz alta hasta que llego la parte que nos interesaba...

La prueba es positiva...

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¡Espero que les haya gustado!
Nos leemos luego

- Okashiro Yukki