Mateo

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Pequeño Mateo hermoso y fiel cachorrito, el único que disfruta de mi compañia bajo esta fría y desolada habitación, teatro de pesadillas y sueños.

Mis padres me trajeron aquí, dijeron que era por mi bien aunque desde que naci no me siento de esa forma.

Grite, luche, proteste por que me dejaran salir de este lugar que me causa terror pero nadie parece escuchar mis suplicas, solo somos Mateo y yo, aquel parece estar siempre feliz por la forma en la que mueve su cola pero ¿porque? Si él también esta encerrado como yo y muchas veces hasta los ángeles negros llegan y nos golpean, yo solo puedo gritar pero siento que nadie me escucha, todos me evitan e ignoran al pasar por mi puerta.

Mateo ¿por que aun eres felíz?

Todos los días un hermoso ángel vestido de un blanco puro y sin errores viene a visitarme, ella dice que yo estaré bien si tomo esas cápsulas de nieve que siempre trae cuando me visita, también están esos picaflores que se cuelan entre los pequeños agujeros de mi ventana y se posan en mi brazo para después llenarme de su líquido que traen en el pico... Me gusta.

Cuando ellos hablan para consolarme, susurran que el néctar que traen sus picos es la pócima de la libertad y si dejaba que ellos la inyectaran yo seria libre muy pronto como ellos ¡VOLARE! !ELLAS PROMETIERON QUE VOLARE!.

Mateo hoy desapareció, se fue, lo tenia entre mis brazos acariciándolo y jugando cuando de pronto solo se esfumo teniendo como sustituto un poco de arena en mis manos, lo busco y lo busco en todos lados pero no esta ¡No está! me estoy desesperando, no puede dejarme es mi único compañero, no debe de irse, siempre debe estar conmigo hasta el final... me lo prometió, estaría conmigo siempre.

Cuando lo enterré junto a mi abuelo y me sonrió lamiendo mi mano prometió no dejarme solo, que el siempre estaría allí para cuidarme siendo esa la razón por la cual fue despedazado por otro perro mucho mas grande, solo trato de defenderme. Pidió que no llorara cuando intente tomarlo por encima de su pelaje marrón lleno de algo pegajoso y de color rojo como la salsa que le untaba a mi hermano pequeño cuando jugábamos.

¿estaba jugando verdad?

No me dejes Mateo, todos huyen de mi cuando intento acariciarlos, por favor.



















-Kyungsoo, bebé. -Apareció la voz de la madre de este por entre las rejas de una pequeña ventana.

La mujer solo lo llegaba a visitar una ves a la semana desde el día en que diagnosticaron a su hijo mayor con esquizofrenia teniendo por obligación el internarlo en un centro de rehabilitación.

La mujer entristeció al ver al mayor de sus hijos en una esquina encogido, parecía tener frío pero no era eso... Kyungsoo estaba intentando encontrar a Mateo, Lo buscaba en todos los países en el que habían viajado cuando los picaflores le regalaban la sustancia de la libertad que tanto les gustaba. Llego a China pero no lo encontró, luego viajo mucho mas lejos con la esperanza de pensar que su amigo había decido tener un viaje mas largo ya que no lo sacaba a pasear muy a menudo.

-¡Kyungsoo! -Volvió a gritar la mujer algo desesperada, Kyungsoo levanto la mirada con los labios ligeramente abiertos buscando en la blanca habitación a su cachorro.

Cuando estaba apunto de llorar al notar que no estaba allí levantó la mirada con los ojos aguados encontrándose con los ojos dolidos de su madre observándo tan detenidamente.

No notaba el sufrimiento, no se fijaba en el dolor de las miradas, veía a la adorable enfermera como su ángel de blancas e impecables alas que llegaba a cuidarlo pensando que las pastillas para enfermos como él, eran copos de nieve, los pica flores consoladores y dueños del néctar de la libertad no eran mas que agujas llenas de suero o algunas sustancias de proteína que se incrustaban directamente en sus venas, los ángeles negros eran sus demonios; esos que lo atormentaban cada noche cuando aun estaba en casa siendo cobijado por su madre cada ves que despertaba gritando o simplemente no llegaba a dormir por mas de tres días con el temor de ser atormentado con golpes que nunca llegaban.

MATEO/ KaisooDonde viven las historias. Descúbrelo ahora