TECHI X MEMI (HIRATE YURINA X KAKIZAKI MEMI) - KEYAKIZAKA46

Parte 3- Vuelve a mí

     Habían pasado más de 6 semanas hasta que Techi estuvo en condiciones de moverse y darse cuenta de la carta.

Hirate Yurina se encontraba fumando un cigarrillo sin filtro mientras leía la carta. Aún le dolía la herida en su hombro derecho, pero más le dolía que Memi la había abandonado. Al estar leyendo la carta sus lágrimas corrían por sus mejillas automáticamente sin ni siquiera pedirle permiso salían de sus llorosos ojos.

La carta decía lo siguiente:

Haberte conocido ha sido mi mayor tesoro. El descubrir lo que siento por ti, el sentir estos sentimientos que empezaron tan rápido. Para mí tú has sido mi milagro. Me entristece no despedirme de ti antes, el no haberte dado la noticia que me ascendieron y que ahora estaré al frente también de la Batalla.

Veo el panorama de todo esto y me pregunto en dónde figuramos nosotros, ¿qué somos para el mundo? Es ahí donde me doy cuenta que sólo nos tenemos tú y yo, los demás no saben nada de nosotros y sólo nos miran como más del montón...

Pido más minutos para verte, contemplar tu rostro y sentir tu mirada en mí. Qué gracioso ¿no? Que el tiempo nos separe y sea el mismo quien se encargue de reunirnos otra vez en el futuro.

Sentí morir cuando me dijeron que habías sido herida en batalla, yo no conocía antes todo esto, pero es abrumador el sentimiento del miedo al perder a alguien.

Sentir que me parten en dos, una debilidad que no conocía y sin embargo abracé y me motivó a ser fuerte y enlistarme yo también.

Me parte el corazón verte luchando para esperar a que vuelvas en esas condiciones. Admiro demasiado tu coraje y valentía, es por eso que tengo que despejar mis miedos.

Me prometí a no perderte de nuevo y yo también luchar.

Miró al cielo y no es azul, no me siento triste pero tampoco feliz. Su color es rojizo apagado anunciando su despedida, tan cual debo hacerlo yo de ti y dejarte ir esta vez.

Esta carta no es una despedida entre nosotras, sino un hasta luego, nos veremos pronto.

Reconozco que soy una más del montón, pero soy tuya.

Al terminar de leer la carta, Techi trago saliva porque supo que Memitan le había dicho todo lo que callaba en esa carta. La guardó y ya estaba comenzando a pensar como llegar hasta donde estaba Memi.

El soldado YuiPon interrumpió los pensamientos de Techi al entrar en su oficina.

Yuipon: Ya estamos listas, hay que partir.

Techi asintió.

Techi: Pon, quiero pedirte un favor- se acercó a ella y le puso su mano izquierda en el hombro derecho de Yuipon.

Techi: Quiero que tomes mi lugar, que estés al frente porque no puedo estarlo yo en la batalla en estas condiciones, ni mental ni físicamente-

Yuipon en silenció asintió. Era conocida por ser una soldado de fuerte temple, casi tan temible como Techi kun.

Yuipon: No te preocupes, cuidaré bien del batallón, espero que te recuperes pronto y encuentres lo que buscas- le dijo con una seriedad implacable.

Techi: Te lo agradezco, Neru san será tu mano derecha- finalizó despidiéndose con un frío abrazo de Yuipon.

Agarró sus cosas y se marchó por aparte. Sabía las coordenadas en donde el batallón de Memi se encontraba.

Las horas se le hacían eternas para verla y sólo pensaba en lo que le diría cuando la viera de nuevo.

Cuando Yuipon se presentó ante todas como la que estaría a cargo de la operación. Inmediato Neru le pregunto por Techi. Pon le comunicó a dónde se había ido.

Neru sintió una estocada en el corazón, preguntándose ¿En qué habían fallado las dos para terminar así? Ella había dado todo lo mejor para que funcionara, pero Techi kun ni la había tomado en cuenta.

Mientras tanto, Hirate Yurina a.k.a Techi viajaba en tren hasta la locación cercana a su destino con Memi. Era una prefectura alejada y cerca del mar. Se preguntaba qué estaría haciendo Memi en esos precisos momentos.

Memi se encontraba limpiando una arma con gasolina, después la cargaba de municiones. En el fondo escuchaba la potente voz ronca del soldado Kyoko san, quien gritaba que tenían que moverse en menos de 90 segundos hacia las trincheras.

Kyoko: ¡ESTA ES NUESTRA TIERRA Y VAMOS A EXTERMINAR A ESOS INTRUSOS! ¿ESTÁN CONMIGO?-

Todas gritaron al unísono: ¡HAI! (SÍ)

Memi escuchó los estallidos de los cañones. Todas salieron y comenzaron a formarse para embestir a los enemigos y así fue tal como lo planearon. Su primera batalla, su primera victoria. Desde sus adentros se la dedicó a Yurina. Deseaba verla y tenerla en sus brazos. ¿Acaso era demasiado pedir? Para alguien de su rango, sí.

Se cuido bastante para atacar y no ser herida en batalla, pero lamentablemente cayó y se lastimó fuertemente su codo izquierdo.

La atendieron en la enfermería en cuanto terminaron esa tercera batalla. Se alejó un poco de las actividades, pero aún seguía asistiendo a todo cuanto podía.

En uno de sus ratos libres fue hacia al mar para aclarar sus pensamientos y descansar un poco. Pero desde lo lejos divisó una figura de espaldas altiva y elegante. El sol brillaba tan intensamente que cegaba y hacia ver esa figura aún más hermosa. Conforme se fue acercando. Ahí estaba ella. Hirate Yurina.

Cuando se volteó vio a Memi. Poco sonrió. Memi comenzó a llorar demasiado que cayó en la arena de rodillas. Techi fue hacía ella y la abrazó, juntas lloraron.

Memi: Creí que quizás no nos volveríamos a ver.

Techi: Cómo iba a dejar ir a mi felicidad, tú eres eso para mí Memi- le dijo al oído abrazándola aún más y callando los sollozos de Memi.

Memi: ¿Me perdonas?, jamás quise abandonarte- se disculpó haciendo reverencia inclinando su cabeza hasta tocar la arena. Techi la levantó deprisa.

Techi: Desde que te fuiste, te perdone y ahora estoy aquí- al escuchar eso, Memi la abrazo aún más.

Memi: ¿Es mucho pedir si quiero ser tu dueña?, quiero ser tu felicidad todos los días, quiero que me lo permitas.

Se acercó tanto al rostro de Yurina hasta besarla suavemente. Techi correspondió al beso enmarcando el rostro de Memi entre sus manos. Al pausar y estar respirando el aliento una de la otra.

Techi: Yo quiero ser siempre quien este en tus pensamientos, quiero seguir siendo la razón de tus miradas, que si yo respiro tú lo hagas también. Que si me llevo tu vida, la mía se quede contigo.

El segundo beso lo inició Yurina, más profundo que el anterior. Cuando terminaron suspiraron.

Techi: Jamás te dije que te enlistaras, veo que te han herido también- le dijo con tono de querer regañarla por su ineptitud, pero a la vez admirando su coraje y valentía. 

Memi: Fue una tontería de mi parte, pero pronto me recuperaré, ¿quieres acompañarme a mi habitación?, quiero ducharme y me encantaría que me acompañaras.

Techi trago saliva como también se ruborizó dudando, pero después asintió.

Techi: De acuerdo, vamos- dibujó una media sonrisa en su rostro. Memi sonría con una felicidad que no le cabía en su corazón ni en su rostro. 

Después de bañarse juntas, cenaron, rieron y platicaron un montón de todas las cosas. Poniéndose al corriente.