En el mundo, vuelve a predominar el precioso aroma a naturaleza. He visto cómo el sistema del hombre fue destruido por la avaricia y deseo de seguir evolucionando.
Hoy mismo no sé quién soy, tengo recuerdos de ese futuro pasado, en el que la naturaleza era escasa, y las personas luchaban por vivir. A pesar de tener esos recuerdos, no sabía qué era todo eso.
Me encuentro en el nuevo comienzo del fin, donde las noches son oscuridad pura, donde aún no se conoce el fuego. Pero no voy a hablar del nuevo comienzo del fin, sino del futuro pasado.
La evolución que el hombre quería, consistía en la extinción de la naturaleza, y el predominio de la tecnología. Nuestro planeta se vio afectado por los cambios bruscos y malas decisiones que los humanos tomaron a lo largo de esos años.
Fue entonces, cuando mis ojos vieron el mundo arder. Las llamas lo consumieron todo, y todo se convirtió en brasas, flotando en el universo, tan infinito para todos, sin saber que de una estrella, saldría el nuevo comienzo del fin, una historia que jamás terminará, porque siempre se cometen los mismos errores desde el comienzo.