Paranoid

Capitulo uno.

Miro perdidamente el techo, el trance me congela, y el brillo impacta mis sentidos, apenas respiro. Incapaz de calcular mi tiempo perdida en mi subconsciente ,apenas reacciono y tomo conciencia de mi existencia, deslizo mis dedos por la sabana blanca y juro tener una expresión estupefacta en el rostro, parpadeo e inhaló después. Comenzaban apenas mis vacaciones y lo primero de la lista de cosas por hacer parecía tirarse en la cama y hundirse en recuerdos, que por mas que analizaba pareciese que jamas tendrían respuesta. Tiempo atrás fui capaz de superar mi afición a la depresión, sin embargo ahora temo por que este trastorno regrese y me dome de nuevo. Y como no, si hace precisamente tres años viví una de las mas amargas y denigrantes experiencias, mi madre nos abandono e hizo parecer que todo lo que vino de su parte no fue nada mas que un mal chiste. Fue algo impactante, increíble y mas que nada inesperado, que consumió mi motivación y modifico horriblemente mi vida, pero como dije antes, de tanto pensarlo, la cordura se desgasta, la impotencia penetra y las dudas hieren y crecen. Tan solo la fecha me arruinaba el día, fluyendo la confusión en mi mente y la ira de no superarlo era lo único en lo que podía pensar.

En intentos de olvido, agradezco aun tener a mi padre a mi lado, aunque me sienta medio vacía, aunque me sienta invisible, aunque no sea el mismo de antes, aunque esta deprimido, aunque que esta igual de hundido que yo, la soledad me hubiera orillado a la muerte mental.

Soy consciente de mi enfermedad, de mi obsesión, pero intento que no me limite y lo único que siempre anhelo es una vida normal y sencilla, si nada hubiera sucedido, si supiera continuar sin mirar al pasado...si pudiera, pero por mas que intento algo siempre falla, le miento al mundo, me miento a mi misma.