† Maltratada † {Zayn Malik}

Capitulo IX

Amaneció y yo traía un fuerte dolor de cabeza, no aguantaba tal dolor, sin embargo me levanté y no recordaba nada de ayer, salvo que Zayn había golpeado a Coin. Luego baje a la cocina, traía una jaqueca horrible. Entrando a la cocina me encontré con una sorpresa.

-¿Qué haces tú aquí?- ahí estaba la tipa esa, France para ser precisa. Yo la vi con repugnancia.

-No te importa- dijo sin quitar la mirada de su móvil.

-Si me importa. Es mi casa y quiero que te vayas ahora mismo. ¡Lárgate!-Le dije gritando, ya que estaba MUY enojada. Ella solo me ignoro y tecleo algo en su celular, me arme de fuerzas y me acerque a ella. Y cuando pude le di una cachetada.

—¿QUÉ TE PASA?—Se levanto enojada de su lugar.

—Te dije que te marcharas. ESTA ES MI CASA Y YO HAGO LO QUE QUIERA.

—¡ESTA NO ES TU CASA, ES DE ZAYN! Y TIENES QUE RESPETARME PORQUE YO SOY MAS QUE TU.

—¿A qué mierda te refieres con…

—Descúbrelo tú misma, cariño— Zayn venía entrando a la cocina y venía agitado.

—¿Qué está pasando?—Pregunto exaltado.

—Ariana, me quiere correr de aquí—Dijo con cara de capricho. Ella se acerco a él y le dio un beso en los labios. ¡EN FRENTE DE MI! No sé porque, pero me dolió. Merecía respeto y más si está “Era mi casa”. Me acerque a Zayn y le di una cachetada.

—¡No habrá boda! ¡Se cancela la boda!—Y me fui hacía mi “Habitación”. Tenía un maldito nudo en la garganta.

El dolor de mi cabeza había aumentado. Comencé la búsqueda de mi celular, cuando lo encontré le mande un mensaje a Borhan, para que me pasara el teléfono de Hemmings. Necesitaba hablar con él. No quería salir de mi habitación. Unos golpes en la puerta interrumpieron mis pensamientos.

—¿Quién?—Pregunte. Hoy en definitiva no tenía ganas de salir de mi habitación.

—Ariana, ábreme. —Era la voz de Zayn. Pero claro que no lo haría.

—¿Qué quieres?

—Tenemos que hablar.

 —No tenemos nada que hablar.

—No podemos dejar las cosas así. Por favor.

Oh por dios. Ahora sí que esto era nuevo, Zayn rogándome. Tenía que aprovechar la situación, aunque ya sé que dependiendo de mi comportamiento vendrán las consecuencias. Me estaba acostumbrando.

—No. Me hartaste. No te quiero ver.

Al principio creí que había entendido que no quería hablar con él y que se había marchado por fin. Pero las cosas no fueron así, él fue a conseguir una llave para abrir aquella puerta. Me asuste mucho, sabía que lo que me haría no sería nada bueno.

Así que cuando abrió la puerta yo me fui hasta el rincón más lejano que encontré en el sótano. Él lo noto.

—No te haré daño. —Yo trague duro—. No podemos cancelar la boda. Tenemos casi todo listo.

—No me importa—Miré a otro lado indignada.

—Ariana, tenemos que casarnos. Después de mínimo un año y medio podrás hacer lo que quieras.

—Sabes, no me importa. Me iré de esta casa lo antes posible. Te podrás quedar con France, y con ella casarte. No me interesa en absoluto que seas un irrespetuoso con tu “Prometida”.

Sentí su palma en mi mejilla. El estiró mi cabello.

—¡Tu harás lo que yo diga! El que manda aquí soy yo. Tú no tienes ni voz ni voto. A ti no te debe importar con quien hago lo que se me pega la gana y con quién no. Eres una basura—Susurro. Me arme de valor y dije algo que jamás debí decir.

—Por eso, por cómo eres siempre prefieren a…—Hice una pausa. El me miraba confundido y lo siguiente lo dije susurrando, pero suficiente de entender. —Coin Hemmings.

Su cara se torno roja y sus manos se hicieron puños. Me llego una oleada de terror, pero jamás me arrepentí de haber dicho aquello.

El me aventó hacía el colchón que está en el suelo, primero comenzó con una cachetada. Y gritándome que repitiera lo que había dicho, pero yo hacía caso omiso y eso sirvió nada más para darle más leña al fuego. Sus golpes aumentaron de nivel, cada vez eran peores y estaba segura que mis gritos se escuchaban por toda la ciudad.

Personas tocaban la puerta con brusquedad, querían tratar de ayudarme, pero era un Zayn eufórico, era un moustro. Jamás debí de haber dicho aquello. Llego al punto de darme patadas. Jamás me había hecho algo así. Jamás. Y ahora no le importaba quién lo escuchara. Sólo con mencionarle a Hemmings, se puso de esa manera.

Yo sólo veía sangre, y estaba segura que perdí la conciencia. Si esto era el “Tenemos que hablar” “No podemos dejar las cosas así” “No te haré daño” prefería no hablar, dejar las cosas así y preferiría el “Nunca te haría daño”.

No supe nada más.

Oh*Se queda en silencio* que intenso. Cortó pero intenso, Hahaha. Espero y les haya gustado... esperemos que Ariana esté bien :o 

 Hood♥.