Shipp; Mikellino.
─Trolli va a volver, Trolli va a volver, Trolli va a volver...
Se repetía una y otra vez mientras miraba el portal apagado, sus manos sujetadas al barandal temblaban con exageración al igual que sus labios, y sus ojos yacian expectantes y con ojeras esperando la llegada del azabache.
Sintió unos pasos tras de si, pero ignoro estos. La persona detrás de el aclaró su garganta intentando llamar la atención del castaño, más fue en vano.
─Mike... Trollino no va a volver, recuerda. Fue atrapado por las sombras, y quién sabe si esta muerto. Ya superalo.
Todos sabían qué el peliverde no era el mejor consolando, pero oír aquello por parte de su amigo le formaba un nudo en la garganta. Hizo una mueca y volteó totalmente enojado mientras cerraba sus puños contra su pecho.
─¡Callate, callate! ¡No sabes lo que dices! Trolli volverá... Trolli no puede abandonarme... No puede..
Se hizo unos pasos atras apoyándo su espalda en las vallas, Manu hizo una mueca mientras pasaba su mano por su nuca.
─Perdón. Mejor vete a dormir, mañana habrá otro portal y debemos estar lo mejor preparados.
Dicho esto se fue, dejando a un castaño en soledad esperando por su mejor amigo.
─Te encontraré..
(...)
─¡Eh, hay un nuevo portal!
Rápidamente salió de su tienda de acampar, aún soñoliento subió torpemente a la casa del árbol observando a sus amigos.
─Es... Es el portal a la dimensión de Trollino.exe...
Murmuró Mike sorprendido, colocó su manó en su boca. Su instinto le decía qué Trollino estaba ahí, debía estar ahí. Agarró la elitra y se la colocó, e ignorando los llamados de sus amigos saltó dirigiéndose al portal.
─Ahí voy, Trolli..
─¡Mike no!
Se quitó la elitra tirandola a un lado, posteriormente saltó al portal de color carmín. Al caer tropezo, cayendo directamente al suelo, levantó su vista teniendo un amplió paisaje del castillo negro y rojo de Trollino.exe, sin esperar a sus amigos corrió entrando a la mansión, Esquivando a todas las sombras.
Al llegar al último piso una sombra se le atravesó, cayendo frente a los pies de Trollino.
─¿Trollino...?
Levantó su vista, hizo una mueca al ver los ojos del azabache, se hizo hacía atrás bruscamemte pero el .exe enterró su espada en la pierna del castaño sacandole un grito de dolor y haciendole imposible el escape. Soltó una risa.
─Te estaba esperando, Mike. Cómo verás, estas herido, y cuando tus amigos lleguen probablemente estes muerto...
Hubo un silencio donde ambos no hablaban, el castaño respiraba de forma agitada y la sangre no paraba de salir.
─Pero, te tengo una propuesta.. Tengo a tu Trollino encerrado aquí, y únicamente lo dejare libre si... Te unes a mi.
Se inclinó un poco extendiendole su mano, Mike comenzó a negar con inseguridad mientras las lágrimas corrían por sis mejillas.
─Se que quieres, dulzura. Lo dejó libre y con vida, pero a cambió únete a mi, obteniendo además un poder inimaginable, muy fácil.
Mike suspiró, temblaba levemente y las lágrimas no paraban de salir al igual que la sangre.
(...)
─M-Mi cabeza...
Tartamudeó mientras se tocaba la recien dicha, mareado observó a su alrededor, estaba todo oscuro y el color negro de las paredes junto al carmín oscuro no ayudaban a la iluminación. Se levantó a duras penas.
─¿Qué hago aquí? ¿Chicos? ¿Mike, Timba, Tina... Manu?
Llamó sin recibir respuesta, chocando con todo logró salir de aquella habitación. Ahora todo era mas claro y con los ojos entrecerrados intentaba acostumbrarse a la luz.. Lo último que recordaba era quedar atrapado en la dimensión de Trivago y ser arrastrados por unas sombras, le enterraron una aguja y... No recuerda más, pero le tranquilizaba saber de que Mike estaba bien.
─¿Es Trolli...? ¡Es Trollino!
Abrió sus ojos encontrándose con una emocionada TinenQa, y tras ella Timba y Manu, frunció su ceño al no ver al castaño.
─Chicos, me alegra verlos. ¿Y Mike?
Los otros tres se miraron preocupados, Tina decidió explicarle todo lo sucedido.
─Verás... Cuándo quedaste atrapado en Trivago, Mike estaba realmente histérico y ansioso por encontrarte, iba a la casa del árbol quedandose todo el día observando el portal para ver si regresabas. Al aparecer el portal a esta dimensión entró sin esperarnos, ahora suponemos que debe estar con Trollino.exe.
El azabache suspiró, observó las escaleras del lugar y frunció mas su ceño.
─Vamos a buscarlo.
Todos comenzaron a correr hacía la azotea evitando a todas las sombras posibles. Estaban realmente cansados pero al menos llegaron al lugar donde estuvieron frente a frente con el .exe.
─Vaya vaya, Portalers... Mas bien, Portalers menos uno.
Trollino gruñó, estaba realmente enojado, quería ver a Mike, quería tocarlo, abrazarlo y besarlo. Timba habló.
─¿Dónde esta Mike?
─Oh, ¿Él? Tranquilos, esta bien.. Son realmente suertudos al tener un amigo que daría todo por ustedes, especialmente por Trollino.. Pero para mi suerte, ahora es de mi propiedad.
Dijo con burla, los héroes se miraron entre si con preocupación y miedo de lo que podría suceder.
─Mike, ven aquí.
Llamó el azabache con una sonrisa cínica, voltearon hacia el castaño quien caminaba cabizbajo y tensó, apretando sus puños, con una venda en la pierna.
─¡Mike!
Exclamo Trollino, entre feliz y preocupado. Pero su media sonrisa cambió a una mueca al ver los ojos del castaño; Un .exe, éste al ver al azabache sano y salvo sonrió mientras las lágrimas inundaban sus ojos.
─Aceptó ser mi aliado a cuestas de salvar a Trollino, muy tierno, ¿No? Ahora despidete, dudo que vuelvas a ver a tus amigos, Mike.exe.
El castaño comenzó a caminar en dirección a sus amigos. Abrazó a Tina, seguida de Manu, Timba, y finalmente Trollino, este sin pensarlo dos veces lo agarró besandolo.
─Volveremos a por ti, mascotita..
Mike pasó sus manos por sus ojos quitando las lágrimas, volteó caminando en dirección al de ojos negros quién sostenía una sonrisa cínica, el castaño sonrió.
─Adiós.
Dicho ésto, una gran sombra rodeo a ambos, y sin más, desaparecieron, dejando a unos amigos preocupados y a un chico con el corazón destrozado.
