Llegaste Tú

El Comienzo

Era un lunes cualquiera, mi alarma sonaba sin parar hasta que desperté y la apagué, era inicio de clases, no podía creer que era mi último año de secundaria, estaba emocionada pero triste a la vez, ya que seria el último año con mis compañeros de curso, que más que mis compañeros son mis hermanos.
Desperté, tome una ducha y me prepare un rápido desayuno
- ¡Diablos! -Digo luego de ver la hora, se me había hecho tarde y era mi primer día de clases, ¡Luciana cuando vas a cambiar! Exclamó para mi misma. Tomo mi mochila revisando que no faltará nada, me miro una última vez en el espejo para asegurarme de que me veía bien, tomo mi teléfono, mis llaves y salgo rápidamente de mi casa, camino lo más rápido que puedo para llegar a tiempo, aunque el colegio está a unas pocas calles de mi casa.
Pasan como 5 minutos y llego al colegio, es raro decirlo pero extrañaba este lugar, más por mis amigos. Me acerco a mi clase y veo si están mis amigos, para mi buena suerte los encuentro, veo a mis amigas y corro hacia ellas para abrazarlas
- Auri - Gritó al ver a mi amiga seguidamente la abrazo.
- ¡Luciana! - Exclama Dinah al verme.
¡Dios ya necesitaba verlas!

Auri y Dinah son mis amigas desde que tengo memoria, son mis hermanas del alma, aunque en los últimos años Auri y Dinah son más unidas.
- ¡Hey Chicas! - exclamo

- ¿Si? - contestan las dos al unísono

- ¿Hay algún chico nuevo? - les pregunto

- Pues hay un repitente de año llamado Carlos y una chica, no se su nombre - Me responde Dinah

- Hola, chicas lamentó interrumpirlas pero es hora de pasar al salón - Nos dice mi compañera Alexandra, a lo qué las tres asentimos
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Pasa aproximadamente 1 hora en la que nos dicen nuestro horario de clases, las normas del colegio y algunas actividades que tendremos, luego de esto toca el timbre que indica que es hora del almuerzo.
Salgo de mi clase y me dirijo a la cafetería, en el camino me encuentro con mi mejor amigo Tyler, al verlo corro hacía él y le doy un gran abrazo.

- Hermanita - Me dice Tyler correspondiendo mi abrazo.

- Te extrañe - Le digo

- Yo igual, lastima que no estemos en el mismo curso - Me dice en tono triste

* Tyler es un año menor que yo *

- Pero siempre podremos vernos - le digo tratando de levantarle el ánimo

- Eso me reconforta un poco - dice seguidamente de darme un abrazo

- ¿te veo a la salida? - Me pregunta, a lo que yo asiento

- Nos vemos luego - le digo mientras se aleja

Tyler era un gran apoyo para mi ya que siempre estaba conmigo.
El timbre sonó y corrí a la clase de química con el profesor Daniel, que era muy simpático. La clase transcurrió normal y cuando acabó salí del salón acompañada de Auri, Dinah y Alexa, afuera estaba Tyler esperándome a lo que Auri no reaccionó nada bien, ya que era su ex, note a Tyler incómodo entonces le dije a las chicas que me iría con el y las vería mañana.

- ¡Genial!, tendré que ver a Auri todos los días por ti - dijo Tyler algo molesto

- Deberías hablar con ella y arreglar las cosas

- Tu sabes muy bien que ella rompió conmigo solo porque no tenía permiso de sus padres

- Debes entender que estaba asustada por la reacción de su padre- dije rodando los ojos

- En fin, ¿te llevó a tu casa? - dijo Tyler señalando la puerta a lo que yo asentí

Caminamos unas cuantas calles hasta mi casa, donde me despedí de Tyler indicándole que debía hacer mucha tarea.
Estaba tan cansada luego de clases que quedé dormida en cuanto termine mi tarea sin saber que mi vida cambiaría drásticamente.
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Como otro día típico de clases desperté, tomé una ducha y me dirigí a la cocina, tome un rápido desayuno, como siempre mi madre ya no estaba ya que debía ir a trabajar, mi padre no vivía conmigo así que como de costumbre estaba sola. Salí corriendo hacia el colegio ya que otra vez se me había hecho tarde.
- ¡Mierda! - exclamé al ver que ya todos estaban en el salón y el antipático profesor de historia no me dejaría pasar.

- Que vocabulario pequeña - dijo un chico detrás de mi al cual no reconocía por lo que supuse que era nuevo.

- ¿Y tu eres? - le dije rodando los ojos.

- Peter Stevens, soy de nuevo ingreso - dijo con una sonrisa seductora, la cual me causó mucha risa.

- Que simpático, un gusto señor Peter - le digo en tono de burla.

-¿Me dirás tu nombre pequeña?.

-Primero que nada no me digas pequeña y segundo me llamo Luciana Wilson - le digo sonriendo

- Mucho gusto Luciana - me dice sonriendo

Peter tocó la puerta del salón y el antipático profesor nos dejó ingresar gracias a que era de nuevo ingreso. Peter se presentó ante la clase y se sentó a mi lado, las clases transcurrieron normales. Al sonar el timbre que indicaba que era hora de almuerzo Alexa, Dinah, Auri, Peter y yo nos dirijimos hacia la cafetería, Peter platicaba con Dinah y Auri mientras Alexa veía su teléfono encantada por los mensajes de su novio Noah mientras me decía lo encantador que era. Siento unas manos cubriendo mis ojos y me asusto, volteo y miro a Tyler sonriendo.
- Hola pequeña - dice con una sonrisa.

- ¿Qué pasa? - le digo sonriendo.

- ¿Quién es ese que habla con Auri? - dice en tono molesto. Tyler es tan celoso que a veces exagera.

- Es Peter, disimula tus celos y quita esa cara de amargado.

- Cambiando de tema, ¿Te espero a la salida? - me dice sonriendo.

- Dejame pensarlo - le digo con una sonrisa pícara.

- ¿Tú también te irás con el señor Peter todas mías? - dice rodando los ojos

- Es broma señor exagerado, a ti no te cambio - le digo con cara de perrito

- Te veo más tarde pequeña - dice seguidamente de abrazarme

Las clases transcurren normales hasta que llega la hora de la aclamada clase de química donde todos debemos buscar pareja para trabajar y para ayudarnos a salir bien de la materia, Dinah hace pareja con Alejandro, uno de mis amigo que conozco desde que tengo memoria, solo faltamos Auri, Peter, Luis y yo.
- Bien, ¿quieres trabajar con Luis o Peter? - dice Auri riendo ya que ambos eran pésima opción. Pero debíamos ayudarlos a pasar la materia como buenas amigas.

Pensé en Luis inmediatamente ya que no sabía la forma de trabajar de Peter pero Luis es algo insoportable y molesto.

- Con Peter - digo sin tener otra opción.

- Bien, seremos tú y yo pequeña - dice Peter en tono burlón.

- Ya te dije que no me digas pequeña y mejor concéntrate en sacar buenas calificaciones - digo rodando los ojos.

No sabía en lo que me había metido al escoger a Peter, sin saberlo era el inicio de un cambio radical en mi vida.