4. Accident.

77 4 1
                                    

-A mi no me importa si tienes el tiempo suficiente para llevar a todas tus parejas a tu habitación o si estas trabajando de algo que no me interesa saber, pero éste edificio le da preferencia a estudiantes por una razón y no es precisamente para escuchar sus desagradables ruidos durante toda la noche. -Liam tenía las manos en sus caderas y su mirada pesada hacia arriba, aguantandose al chico de cabello largo y castaño claro que lo sermoneaba. -Porque, para que lo sepas, algunos tenemos que estudiar, tenemos trabajo que hacer y no puedo concentrarme con tu chica, o "tus" tal vez, gritando toda la bendita noche.

-Si, bueno, yo no te digo como vivir tu vida amigo, no es mi culpa que seas un aburrido o que no puedas conseguir una chica para ti, pero no voy a admitir que vengas a hablar mal de mi pareja, ¿Entiendes?, ¡Yo no me meto en tu vida así que no te metas en la mía!

-Discúlpame, sí te metes en mi vida, lo haces cada noche que no me dejan concentrarme en lo mio con sus estúpidos ruidos.

-¡Por favor! -El castaño se giró y dio un par de pasos un poco incrédulo. -Podrías... -Lo miró de nuevo. -¿Podrías dejar de exagerar?, ¿Qué tanto podrías escuchar desde mi apartamento?

-Bueno, no te he escuchado negar en ningún momento que no lo haz hecho, créeme que si fuera por mi, preferiría no saberlo. -Liam rodó los ojos. -Además, creo que me escuchaste perfectamente cuando grité, ¿No es así? -Liam abrió la boca pensando decir algo pero no le dio tiempo de hablar. -¿Ves?, puedo escucharlo perfectamente y no puedo hacer nada y es tu culpa y NO estoy exagerando.

-Oh amigo, sí que estás exagerando.

-No. ¿Crees que puedo concentrarme en mi trabajo mientras escucho como al otro lado están teniendo sexo?, ¿O es que tu puedes? -Ironizó. Liam evitó la mirada un poco molesto. -No me importaría que fuera cosa de un día o dos, ¿¡Pero todos los días!?, No pienso soportar más eso, ¡así que relaja tus hormonas y abstente por lo menos una vez! -Él chico se alejó de Liam y caminó hasta la puerta de su apartamento.

-¿Qué? ¿Y debo hacer lo que tu me digas? -El chico se detuvo frente a su puerta y lo miró otra vez.

-Mira, no creo que lo sepas y no creo que te interese. -Rió. -Pero tengo influencias en éste edificio y yo podría hablar con alguien sobre un inquilino inadecuado y quizá hasta peligroso, no sé. -Rió de nuevo para luego disponerse a entrar. Liam solo lo miraba serio. -Ah, por cierto. -Lo miró. -No soy tu amigo. -Finalizó entrando con un portazo. Liam suspiró profundamente rascándose la nuca antes de entrar al suyo con una mueca de desprecio.

-¡Joder! ¡Qué ganas de golpear a ese tipo! -Exclamó tumbandose en el sofá de la sala de estar.

-¿Hablas del vecino que te odia? -Habló Niall desde la cocina.

-¡Desearía acabarlo a puños! ¡A él y a sus estúpidas influencias!

-Liam, la violencia no resuelve nada. Todo problema puede resolverse con un poco de amor.

-¿Amor? ¿Te estás escuchando?

-Es la verdad, Li. Con un poco de amor todos son felices. Yo te amo y estoy feliz.

-Ajá, ¿Entonces debo acostarme con él para que esté feliz? -Se burló.

-Solo si quieres que yo te acabe a puños. -Sonrió sentándose al lado de Liam el cuál rió por lo bajo al ver a Niall con el delantal blanco con rosa que le había regalado y que, por cierto, había dicho que jamás lo usaría.

-Oh ¿Y tu piensas que podrás acabarme a mi? ¿Tu solo?

-No será muy difícil. -Sonrió con superioridad.

-Quiero verte intentarlo. -Habló desafiante.

-Lo haría pero debo hacer los panqueques. -El ojiazul se paró y dio un par de pasos antes de detenerse otra vez. -De hecho, ¿Por qué no le damos un poco de amor al vecino? -Miró al castaño. -Y lo hacemos feliz.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Sep 21, 2018 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Clouds & Pillows [Niam]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora