Twins

9.

Un año.

Ha pasado un año completo, desde que escape de la isla, desde que volví a mi casa con mi familia.

La verdad ha sido bastante solitario, a veces me pregunto si lo mejor habría sido el quedarme y morir allá, tal vez de esa manera podría descansar en paz.

Cuando volví, sabía que no iba a ser igual a cuando tenía dos años. Sabía que las cosas serían diferentes, por supuesto que lo sabía, pero... Pero no pensé que sería de esta manera.

Pero bueno te voy a contar y resumir todo lo que ha pasado en este año.

Desde el primer día que vino Shôta aquí para hacerme los exámenes tanto físicos como psicológicos, para saber si realmente todo estaba bien conmigo y volver a reintegrarme a la sociedad.

Complete todos los exámenes psicológicos y de inteligencia todos fueron perfectos dijeron que hasta podría saltarme grados si todo iba bien.

Shôta pensó que lo mejor sería ir de poco a poco, no llegar y terminar los estudios y todo, porque querían que me reintegrara a la sociedad correctamente.

Entonces decidimos adelantarme los cursos que me faltaban hasta llegar a los niños de mi edad.

Los exámenes físicos estaban bien, al principio eran duros, abdominales, correr, sentadillas, flexiones, pesas y batallas cuerpo a cuerpo más el control de mi quirk.

Claro que todo esto lo hacía Shôta, el me vigilaba, cuidaba y me obligaba a comer algo.

Fuyumi no estaba al tanto de mi, ya que estaba ocupada con sus estudios, mis dos hermanos nunca más los volví a ver, Shoto.. bueno no hablamos, soy como una extraña la verdad y mi papá, Enji.

Desde el día que me trajo de vuelta no me habla, con suerte me saluda la verdad en los días normales, hay veces en las que estoy entrenando o meditando por mi cuenta y el entra de golpe al dojo, alterado y agitado como si hubiese perdido algo.

Y cuando me encuentra con la mirada, es como si estuviera a punto de llorar.
Lo único que hace es correr hacia mi, abrazarme y decir mi nombre.

La verdad al principio era un tanto shoqueante, ya que no me hablaba, la primera vez que pasó eso yo estaba meditando en el dojo y el llegó de la nada gritando mi nombre y cuando me encontró me abrazo, lloró, grito y se durmió conmigo entre sus brazos, cuando desperté yo estaba en mi cuarto sola, y el se había ido y de nuevo era como si yo no estuviera allí.

Ahora es realmente triste, cada vez que le ocurre eso y luego me encuentra y me abraza para al rato después marcharse y actuar como si nada, me duele.

Es como si por un momento fuera su pequeña niña de nuevo, pero después me vuelve a rechazar, se aleja y me ignora.

Cada vez que pasa, no puedo evitar llorar, es como si me estuviera asfixiando y nadie puede ayudarme.

Shôta se ha dado cuenta que me pasa algo, pero la verdad no quiero comentarle nada, el hace de héroe clandestino en las noches y después en las mañanas viene a entrenar conmigo.

En fin, Shôta me enseñó a cocinar algo puedo hacer onigiri, ramen y algunos acompañamientos y nada mas, por ahora eso es más que suficiente para mí.

En todo este año he estado dando pruebas, exámenes físicos y de sangre para intentar distinguir la cantidad de toxinas que tiene mi cuerpo.

Son tantas cosas la verdad que mi cuerpo se esta muriendo, pero gracias a la regeneración que he desarrollado, sea lo que sea que muera en mi cuerpo se cura de manera inmediata.