Transformame

1.El tipo rico

Pov Tyler

Mamá solía hacernos el desayuno a Alan y a mi, luego iríamos al colegio y escuchariamos a los profesores por largas horas y volveríamos a casa, solo para encerrarnos en nuestra habitación para no ver a papá, quiza esa era la peor parte del dia.

Pero ahora mamá no esta, y tengo que tener citas con tipos raros que se sienten solos, pero me pagan realmente bien, me alcanza el dinero para comer y dormir en hoteles.

Hoy tengo una cita con un tipo al cual nunca habia visto en la ciudad y que tampoco parecía tener muy claro lo que quería, pero trabajo es trabajo y no voy a quejarme.

Pasé algunas horas intentando arreglar mi pelo marrón y buscando algo para ponerme mas elegante que mi buzo, tambien marron y mis jeans, ademas de que no se que tan elegante es ir a una cena con zapatillas de lona. Luego de unas horas estuve listo y salí al restaurante en el que habíamos quedado de vernos, entré y me senté, espere aproximadamente 30 minutos, no me gusta que me hagan esperar.

Cuando llegó note que era bastante atractivo, tenia el pelo negro peinado en una especie de tupé y tenia el rostro algo cuadrado, parecía que no se habia afeitado hace 2 dias y tenia los ojos verdes, los cuales eran hipnóticos.
En cuanto a su ropa, vestía una camiseta roja y sobre esta una camisa negra bastante elegante, jeans y unos zapatos, no se de que eran pero parecian elegantes y caros, tambien llevaba aretes en el lóbulo de la oreja y en el helix.

Entró y me saludó con un beso en la boca como acordaba nuestro contrato, tengo que admitir que era un gran besador, parecia que tenia mil años de experiencia.

Segun los daddys, yo tenía 18, lo cual era completamente mentira pero no podia decirles que tenia 17, me hubiera quedado sin trabajo.

Pidió comida por mi y comenzamos a charlar, era un tipo muy atractivo.

-Entonces, que edad tenes?- Pregunte, intentando romper un poco el hielo.

-Tengo 38, ¿muy mayor?- Dijo, mirándome con una sonrisa.

-No, para nada... La edad no es un problema para mi.

Comenzamos a hablar de nuestras vidas, se veía interesado en la mia y en lo que quería para mi futuro, no pude resistirme y le conté algunas cosas poco detalladas de mi no muy lejano pasado, sobre como me habia ido de casa cuando "Cumplí 18", de como extrañaba a mi familia y a mis amigos, amigos los cuales inventé.

Al poco tiempo llegó la comida y no hablamos demaciado, al ser un restaurante caro su comida era la mejor de la ciudad, lo mejor de todo es que el iba a pagar la cuenta y todo lo que yo quisiera.

Cuando terminamos salimos de ahi y nos dirigimos a un hotel alojamiento, el contrato mencionaba que al terminar la cena podría acostarme con el si asi lo deseaba, para lo cual no necesitaba pasar toda la noche con el, aunque asi lo hice.

Solo puedo decir que fue una gran noche y él, un cliente satisfecho.