Capítulo 1

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La tormenta era muy espesa tanto que el limpia parabrisas no seguía el ritmo de esta.

Logre divisar  un letrero destartalado que decía en letras muy desgastadas “san Cristóbal”, aceleré, ya faltaba poco  para llegar a mi pequeña casa en donde de seguro me esperaba una muy molesta madre acompañada de un regaño

-Mierda- masculle para mis adentros de solo pensar en lo que me esperaba.

Los charcos de agua evidenciaban mis pasos, entré casi que corriendo y me detuve al llegar al  porche. 
Tome unas cuantas bocanadas de aire y  toque el timbre

¡maldición¡ había olvidado sacar las llaves, se escucharon pasos desde el fondo de la casa lo que hizo que mi corazón se acelerara y mis manos sudaran.

tragué en seco cuando la puerta se abrió y vislumbre la figura de mi madre con una sonrisa fingida, eso no era bueno, le devolví la sonrisa y pasé

Hacía mucho frío allí afuera, escuche la puerta cerrarse, tome una última bocanada de aire apretando mis manos a los costados, cerré mis ojos y me giré a enfrentar a  mi madre

-puedo explicarlo- fueron mis primeras palabras

–habla, tienes 5 minutos- dijo enojada cruzándose de brazos

—… y-yo estaba co-compran-do— mis dientes castallaban, si no me cambiaba en ese momento era muy probable que al día siguiente tuviera un refriado muy fuerte, ella suspiro hastiosa y dijo:
-anda cámbiate, luego bajas y hablamos-  subí tambaleando las escaleras, agarrándome de las manillas como medio de soporte, se me estaban engarrotando las piernas.

Al llegar a mi habitación fui directo a la ducha desvistiéndome en el camino....

Sentí las gotas de agua calentando mi cuerpo pero eso me trajo a la realidad, a lo que había vivido hace pocos minutos, un escalofrió me recorrió desde los pies hasta la cabeza, empecé a tararear una canción pero era imposible.

No podía olvidarlo, había sido tan real, tan misterioso, sacudí mi cabeza para despejar aquellos pensamientos.

Al cabo de 30 minutos, Salí de la ducha y busqué mi pijama de bob esponja, me la puse pensando en el sermón que me esperaba, solté un suspiro al imaginarme el discurso de mi mamá luego me puse las pantuflas, ya estaba lista para mi regalo, bajé las escaleras a paso lento, mi madre estaba sentada en el taburete de la cocina.

No se giró a verme solo esperó a que me sentara así que rodee el mesón de la cocina hasta quedar frente a ella, no fue necesario que me diera la pauta para hablar, su mirada me decía *habla ahora*

-A medio día me visitó Bells, me preguntó si quería salir de compras a Bourbon y yo acepté
Pensé que no nos íbamos a demorar poco más de tres horas así que accedí, conduje hasta  las tiendas del lugar.
Al regreso todo iba normal hasta que un grupo de policías nos detuvieron ya que en esa Avenida había ocurrido un accidente, posterior a esto cerraron las calles.
Cuando por fin pudimos avanzar  se había formado una caravana  tremenda sin exceptuar que tenía que ir a dejar a Bells a su casa, es por eso que llegue tarde— Dije inquieta mirando mis dedos, trate de sonar convincente ocultando  mi  nerviosismo, desviando la intensa mirada de mi madre ya que ella no parecía muy convencida, esa ceja alzada  y  esos ojos achinados eran prueba de su duda sin embargo, no preguntó más
 
-castigada por 2 semanas- dijo  parándose del taburete para ir al refrigerador, sacó un plato de comida y lo metió en el microondas, ya caliente lo puso en frente de mí, el silencio abundaba pero no más que mi hambre,  me  metí  la  primera cucharada 

–uhmmm¡¡- luego no supe cuando me lo había terminado, me levanté del  taburete y dejé el plato en el fregadero, cuando iba a subir de vuelta a mi habitación, mi madre preguntó
-¿Qué compraron?- sonreí ante la pregunta, sabía que el enojo no le duraría tanto, me devolví hacia la cocina y me senté en el mismo lugar, empezando la plática….

Ya era muy noche, me despedí de mi madre luego de una entretenida conversación, subí a mi dormitorio, me sentí mal por mentirle pero era eso a que me declarara loca y me citara con la psicóloga.

No quería pensar en aquello, tal vez fue una alucinación mía y yo le estoy dando mucha importancia, me acosté y trate de dormir, cerré mis ojos para que el proceso sea más fácil, poco a poco sentí que mis párpados pesaban y que Morfeo me acurrucaba en sus brazos.                           

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⏰ Última actualización: Aug 24, 2018 ⏰

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