(Gaara y tu) Reviviendo Mi Mundo

restaurando mis recuerdos

Llegue a Konoha tres días después, se me hizo un poco tarde, ya que me quede dormida, me había cansado el no haber dormido lo suficiente, regrese a mi forma mitad pez, me puse mi ropa de siempre al igual que mi cabello albino y largo, era hora de hacer lo que no me había atrevido hasta ahora, era hora de volver a rehacer mi vida, no había tiempo de deprimirme, era hora de volver a ser yo, atravesé la aldea llamando la atención de varios ninjas en el recorrido, ya me venia persiguiendo una gran horda de gente, me adentré hacia la torre hokage abriendo la puerta de un solo jalón haciendo sorprender a todos en aquella habitación, mi madre y mi padre

—buenas tardes, vengo a recoger el permiso de la fundación de Kurikagure— dije sonriendo mientras que varios ninjas a mis espaldas iban llegando, entre ellos los novatos y sus profesores

—___?!— ambos se abalanzaron sobre mi tirándome al suelo mientras que los demás seguían en shock, me extraño que el anciano se me tirara en cima pero no arruinaría el momento

—yo igual te extrañe— les abrace hasta que alguien atrás mio me llamo la atención

—disculpen, pero me podrían explicar que hace una renegada como ella en este lugar abrazando a la hokage y a un sannin?—

—deberías tenerme más respeto Ibiki Morino— dije tocando su nariz, este agarro mi brazo bruscamente

—niña renegada, no me toques o veras lo que es el sufrimiento— dijo apretándome sin efecto alguno ya que el cristal me cubría

—hokage-sama, perdonen por el daño hecho a las estructuras—

—d-de que me habl— no pudo terminar ya que con mi otro brazo agarre a Ibiki lanzando lo por el techo, todos se quedaron mirando aquel techo, en cambio yo si un salto llegando hacia aquel ninja que se encontraba valiendo, lo agarre e hice un jutsu que un amigo mio me había enseñado hace algunos meses —loto de la hoja!!!— dije pasando toda la estructura de aquel edificio hasta los suelos creando una gran nube de polvo, se deshizo después de un tiempo dejando ver a un Ibiki casi al borde del desmallo, cree algunos clones y saque a Ibiki de aquel lugar llevándolo a la oficina con un gran hoyo atravesando el edificio, mientras los clones de fundan en la estructura yo curaba a Ibiki dejándolo como nuevo al igual que aquella estructura, como si nada hubiera sucedido

—bueno Ibiki, te acabaste de enfrentar a la nueva Kurikage de Kurikagure, la aldea del cristal, pero te perdono, no hay remordimiento,  y ya encontré los papeles, bueno, si me buscan estaré en mi próxima aldea, ojala les guste, bye— salí corriendo de aquel lugar hacia mi próximo destino, la aldea del cristal, conocida por el chakra del Ying y el Yang.

Llegue a aquel lugar después de algunos minutos, me senté en aquel lugar empezando a generar estructura por estructura hasta por fin tener todo, ya que las bases ya estaba hechas, al anochecer ya estaba todo hecho...y estaba satisfecha con el resultado Kurikagure había nacido y con el la esperanza de millones de personas, después de un rato llegaron algunos aldeanos de Konoha, ambus junto con los novatos y la mismísima hokage —hola a todos, bienvenidos a Kirigakure, la aldea del cristal, supuse que mi madre les había habría contado todos sobre la apertura de una nueva aldea por el territorio y vaya que era algo totalmente cierto, y para haberse creado en un solo día no está nada mal-- cree una cosa como las que ocupan para dar conferencia, cree una sillas adelante y estos tomaron asiento, bueno...este es el momento, respire hondo y empecé a hablar de forma más formal

—buenas noches, hoy estamos aquí para la inauguración de Kurikagure, esta aldea va a representar un "elemento", es uno tal vez no tan conocido entre los pobladores, pero digamos que es uno muy importante, a parte de que cada ninja puede controlar un elemento natural de base, puede aprender más, entre ellos el Ying o el Yang, es muy difícil dominar estos tipos de chakra, pero son uno de los mejores a mi parecer y ya era hora de ser reconocidos por el mundo ninja, como ya se darán cuenta, estas no son estructuras comunes, están hechas de cristal, tienen tanto luz —dije encendiendo las luces de aquella enorme ciudad— al igual que agua, está es totalmente potable, que significa eso?, pues significa que puedes tomar agua hasta de la fuente del parque, ya que esta cuenta con constante movimiento haciendo que el agua pase por un filtro constantemente y así haciendo que esta no se contamine, al igual que la de toda la ciudad, eso significa que puedes tomar agua de la ducha, a parte por ahora contamos con un puesto de ramen, envié un clon hace algún rato, así que la que nos atenderá será Ayame, la hija del encargado de uno de los mejores ramen de toda Konoha, conocido como Ichiraku ramen, ella servirá por ahora, los edificios pueden cambiar— dije haciendo cambiar la ciudad de colores y texturas— también cuento con el permiso de todas las aldeas—era la hora...lo que cambiaría si a la gente le guste la idea...o simplemente la rechace —esta aldea también tiene una ley, a parte de tener un extremo sistema de seguridad, la entrada al igual que otras localizaciones estarán vigiladas por clones de cristal, en que consisten estos clones?, pues estos son creados por mi, cuentan con su propio sistema de chakra, no es como un clon normal,  ya que estos son totalmente sólidos y son mucho más difíciles de destruir, en caso de un ataque puedes meterte en cualquier establecimiento, activare el jutsu -protección de la creación- este encerrara a todos dentro del cristal, quiero aquí a cuatro ninjas en especial, adelante, Haruno Sakura, Senju Tsunade, Hatake Kakashi y Usumaki Naruto— los tres nombrados pasaron al pedestal al igual que algunos ambus o ninjas, los demás los encerré en un cubo y los eleve a un punto alto para que pudiera ver todo muy bien, ya que la entrada no lo permitiría ver —primero Sakura Haruno, da el golpe más fuerte a cualquier lugar, lo más fuerte que puedas— esta asintió y golpeo una casa causándole solo unos rasguños que fueron curados por el cristal al instante —ella esta entrenando para ser ninja médico, pero digamos que no solo eso, sino que la quinta hokage le ha enseñado su jutsu "gran fuerza sobrehumana", para esto deberías de tener un control perfecto de chakra, consiste en juntar chakra en una sola parte del cuerpo y al chocar con una superficie liberarlo de un jalón, ahora Sakura, hazlo en el piso común— esta asintió dándole un golpe haciendo un cráter gigante al piso— ahora Tsunade Senju, sale con todo!— esta golpeo un edificio y al ver que en verdad no podía ser destruido lo golpeo varias veces más sin causarle mayor daño ya que se curaban al instante— ahora en el suelo— golpeo el suelo causando un cráter realmente enorme— -jutsu de tierra, sepultura de tierra- rellene aquel hueco como si nada hubiera pasado— ahora el ninja que copia usara un jutsu de rango A sobre un edifico cualquiera— este selecciono un edificio y lanzó un Chidori sin causarle nada en lo absoluto— y ahora un rasengan— dije mientras que Naruto estampada un rasengan a dicho edificio— esto es en demostración de lo que puede resistir todo esto— no les iba a poner que le metieran un chidori y un rasengan a una persona así que lo deje estar —y mi propuesta es la siguiente, dejar a los renegados entrar aquí, bajo una vigilancia mía, especialmente, les daríamos una nueva oportunidad a ellos dándoles la vida para volver a estar con sus familiares, y no se preocupen por nada, si hacen algo inmediatamente serán exiliados, solo tendrán una sola oportunidad, y conmigo presente nadie podría, a parte aquí no se juzgara a nadie, todos vivirán bien, es una aldea para todos, espero que les agrade la idea, ya que tengo la autorización de todos los kages, les doy la bienvenida a la nueva aldea, adelante, pueden visitar tanto como quieran, gracias por su atención, por cierto, ya contamos con una academia ninja, eso sería todo, pueden pasar la noche en este lugar— dije bajando a todos, estos empezaron a ir lugar por lugar dejándome con Naruto, Neji, Sakura, mi madre y el señor albino...un segundo...—oiga, usted tiene el mismo color de cabello que yo!— dije señalando al que parecía ser el más viejo de todos